10 claves para perder peso mas
fácilmente
Sin gym y sin dieta, a veces
lo único que necesitamos es cambiar nuestros hábitos. ¡Aquí te decimos
cómo!
Hay cosas muy sencillas que solemos
pasar por alto, pero que en realidad son las principales
razones por las que no podemos mantenernos en el peso adecuado. ¡Prueba
estos 10 tips y verás cómo puedes comenzar a bajar esos kilitos extra!
DUERME
MÁS
Un estudio de la
Universidad de Stanford recientemente comprobó que las personas que
duermen 5 horas o menos, sufrían alteraciones en la secreción de grelina y leptina (estas
hormonas se encargan de regular el metabolismo y la sensación de saciedad). ¿El
resultado? En un esfuerzo por intentar sustituir la falta de energía, quienes durmieron poco tenían cravings por alimentos
hipercalóricos. Recuerda: el promedio recomendado de sueño es de 8
horas.
TOMA MÁS
AGUA
La señal que recibe tu cerebro para
decir que tiene sed es muy similar a la del
hambre. Si tomas poca agua, es probable que esto te haya pasado un
millón de veces. ¡Haz la prueba! En cuanto tengas un poco de hambre, toma por lo
menos un vaso de agua y ve si todavía tienes esa sensación. Ojo: la dosis
recomendada de este vital líquido es entre 1.5 y 2 litros
de agua al día.
NO PASES
LARGOS PERÍODOS SIN COMER
El límite que tu cuerpo puede pasar
sin probar alimento son 4 horas, de lo contrario
tus niveles de glucosa se dispararán, tendrás hambre acumulada y terminarás
comiendo de más (¡kilitos de más asegurados!). Haz 3
comidas fuertes y toma 2 snacks al día ricos en proteína y fibra.
CAMBIA LOS INGREDIENTES DE TU COMIDA
¡Estos pequeños ingredientes pueden
hacer toda la diferencia! Haz elecciones
inteligentes: pide una vinagreta en tu ensalada en lugar de un aderezo
ultra cremoso, sustituye la fruta deshidratada por fruta fresca, come pasta integral y no refinada, etc.
CUIDA TUS
PORCIONES
No sólo se trata de comer los
alimentos adecuados, sino ingerirlos en cantidades
adecuadas. Una guía ‘a la mano’ sería: la palma de tu mano para medir
la carne, tu mano completa extendida para las
verduras, tu puño cerrado para los cereales y la punta de tu dedo índice para las grasas.
PLANEA TUS
COMIDAS CON ANTICIPACIÓN
Si haces esto, tendrás la
oportunidad de controlar todo lo que comes:
porciones, calorías, ingesta de grasas, etc. Si de plano no te gusta cocinar o
no te da tiempo, identifica por lo menos 3 lugares en
donde puedas elegir una comida saludable cerca de donde te encuentres.
Ahora que si tienes una cena, ofrécete a llevar un platillo (¡obvio saludable!)
para que no rompas tu dieta.
NO BEBAS TUS
CALORÍAS
Jugos de fruta, tés helado con
azúcar, refrescos, etc. El problema con este tipo de bebidas es que: a) se
venden como ‘saludables’ porque contienen ‘fruta’, cuando en realidad no es así
y b) ingieres muchas calorías y no te da cuenta porque son
líquidos. Si necesitas más sabor opta por los tés (¡sin azúcar!), agua
con un hint de limón, menta o una rodaja de pepino. ¡Perfecto para refrescarte
en primavera!
DATE TU
ESPACIO PARA COMER
Ver tele, estar frente a la
computadora o en el celular, te mantienen distraída cuando
comes y es probable que ni te des cuenta que ya estás llena ¡pero tú
sigues comiendo! Para evitar que te pase, dedícale un
tiempo y espacio sólo a esta actividad. Verás que no sólo disfrutarás
tu comida, sino te servirá de break para despejar tu mente.
CENA
LIGERO
¿Te ha pasado que cuando llegas en
la noche a tu casa te mueres de hambre y terminas cenando súper pesado? Opta por
verduras ricas en fibra y proteínas ligeras como
pavo, pollo o pescado, y un té para dormir mejor.
Recuerda: si cenas pesado dormirás menos y si duermes menos, tu cuerpo de
exigirá comida de más al día siguiente.
COME CON
CONSCIENCIA
Es importante que veas la comida
como un aliado en tu vida, no como tu peor enemigo. Invertir en buenos alimentos a la larga, es invertir en tu propia
salud. Y lo más importante:
¡disfrútalo!