YA ME PUSE EL SEGUNDO REFUERZO, YA LLEVO 4 VACUNAS. ARMADA PARA ESTA NUEVA MODALIDAD DEL VIRUS, QUE ESPERO NO LLEGUE POR ACA, AUNQUE CON TANTA GENTE VACACIONANDO FUERA, ESO NO SERA POSIBLE
El país más poblado del mundo atraviesa una oleada de rebrotes
atribuida a la variante ómicron que está provocando cifras récord de
contagios no vistas desde el inicio de la pandemia en la primera mitad
de 2020.
Asi, la Comisión reportó 2.742 nuevos casos positivos
del coronavirus detectados en la víspera, 2.723 de ellos por contagio
local y el resto, importados.
Las provincias con mayor número de
casos de transmisión comunitaria fueron Shanghái (este, 2.417) Jilin
(noreste, 166), Zhejiang (sureste, 34) y Heilongjiang (noreste, 30).
Las
autoridades sanitarias también informaron este lunes de la detección de
20.718 casos asintomáticos, 20.639 de ellos locales (la mayoría en
Shanghái), aunque Pekín no los computa como casos confirmados a menos
que manifiesten síntomas.
¿Puede tratarse con dexametasona a todos los pacientes de COVID-19?
La dexametasona se debe reservar para los enfermos que más la necesitan. No es conveniente acumular existencias de este fármaco.
Se ha comprobado que la dexametasona no mejora la salud de los pacientes con síntomas leves. Este fármaco es un corticosteroide que se utiliza por sus propiedades antiinflamatorias e inmunosupresoras. Además, se ha observado que, a dosis diarias de 6 miligramos durante 10 días, mejora la salud de algunos pacientes de COVID-19 conectados a respiradores.
El Premio Nobel de
Literatura Mario Vargas Llosa, de 86 años, ha
ingresado en una clínica de Madrid tras dar positivo por covid-19 esta
semana, según ha informado su hija Morgana en las redes sociales. El
escritor se encontraba aislado en su casa de Madrid tras dar positivo y
fue ingresado tras derivarle en neumonía, según ha podido saber La
Vanguardia. El escritor, según la familia, se encuentra estable y su
evolución es favorable.
Pekín, la capital de China, registra un aumento de casos del virus y ya se han empezado a cerrar algunas urbanizaciones para evitar su propagación.
Solo en el fin de semana, el distrito de Chaoyang, el más poblado de la capital y que concentra desde embajadas hasta rascacielos corporativos, ha reportado 26 casos, el número más alto hasta ahora en esta última oleada. Se ha exigido a quienes vivan o trabajen en la zona que se sometan a tres pruebas de ácido nucleico durante esta semana.
Y, a pesar de que el gobierno ha ofrecido garantías de que habrá suficiente comida, la gente se ha lanzado a las tiendas en busca de provisiones.
La pandemia del COVID-19, que ha causado una profunda conmoción en nuestras economías y sociedades, ha subrayado la dependencia que la sociedad tiene de las mujeres, tanto en primera línea como en el hogar, al tiempo que ha puesto de manifiesto las desigualdades estructurales en todos los ámbitos, ya sea el económico, el sanitario, o la seguridad y la protección social. En tiempos de crisis, cuando los recursos escasean y la capacidad institucional se ve limitada, las mujeres y las niñas se enfrentan a repercusiones desproporcionadas con consecuencias de gran alcance que no hacen más que agravarse en contextos de fragilidad, conflicto y emergencia. Los avances logrados con gran esfuerzo en materia de derechos de las mujeres también se encuentran amenazados. Responder a la pandemia no sólo requiere rectificar desigualdades históricas, sino también construir un mundo resiliente para el interés de todas las personas, con las mujeres como sujeto de recuperación.
La covid-19 ha causado la muerte de casi 15 millones de personas en todo el mundo, informó este jueves la Organización Munial de la Salud (OMS), que dijo que el número de muertes atribuidas directa o indirectamente a la pandemia fueron subestimadas.
Los expertos de la organización estiman que 14,9 millones de muertes pueden asociarse a la pandemia, un total que incluye los 6,2 millones de decesos por covid notificados oficialmente a la OMS por sus 194 países miembros.
El resto corresponde a muertes causadas por la covid, pero que no fueron notificadas como tales, así como aquellas causadas por otras enfermedades que no pudieron ser atendidas debido a la sobrecarga que sufrieron los sistemas sanitarios en la etapa aguda de la pandemia.