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General: El Templo en el martinismo
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Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: anidar  (Mensaje original) Enviado: 17/12/2011 13:05

El Templo de Salomón en el martinismo

 

 

 

 

 

El Templo de Salomón es un asunto tan importante en la vida hebrea que marca dos períodos históricos conocidos como Primer Templo y Segundo Templo. Sin embargo, es la construcción del primer templo la que podemos considerar simbólica, pues según los libros de Reyes, el templo se erigía sin que se escuchara allí ruidos de golpes de objetos de hierro. Salomón se distinguió por su enorme sabiduría, él requirió los servicios de Hiram, el constructor, aquel que tenía el conocimiento de la palabra perdida.

 

 

 

Templo en hebreo se dice “hekal”, cuya traducción literal podría ser “él en el templo”. Es la fiesta judía más importante, digamos que el iniciado debe levantar durante seis días el templo a la Gloria del Gran Arquitecto del Universo, y el séptimo día debe dejar de construir y ser el templo, esto equivale a decir que debe profundizar en su ser hasta comulgar con el Dios de su corazón, lo que en la literatura mística se expresa como ir en busca de la novia, del alma o Shej’nah.

 

 

 

El iniciado martinista también construye su templo particular y lo adorna con las luminarias que expresan la Sabiduría, la Fuerza y la Belleza de aquel que no puede ser nombrado. Es así como él mismo se va construyendo día a día hasta convertirse en piedra tallada, la piedra cúbica que en el Templo de Salomón es el “devir” o Sancta Sanctorum, el lugar de más alta vibración, aquel donde dos Querubines con sus alas extendidas nos indican que ellos son los motores de la creación. Ahora entenderemos por qué no se escuchaba durante la construcción el ruido de golpes de pala ni de picos ni de ningún instrumento de hierro, porque en este templo simbólico las piedras somos nosotros mismos.

 

En el Ulan del Hekal, es decir, en la zona que está inmediatamente en el exterior del devir se hallan las columnas de oposición, jakin y boaz, o poder y valor, esas que el iniciado, como tercera fuerza, debe conjugar para llegar a la idea de Unidad por experiencia propia. Entre las columnas se encuentra un altar con una estrella de cinco puntas que representa la humanidad en el exilio, esa estrella está cubierta por un velo que la oculta. Nosotros somos la humanidad en el exilio, por tanto, ahora estamos en la lucha de opuestos, de ahí que nos sintamos separados, pero si actuamos produciremos la conjunción de los opuestos y podremos penetrar en el devir, en el santo de los santos, en la más alta vibración que nos trae la experiencia de Unidad.

 

Nuestro trabajo como agentes de Dios es salir del bosque de los errores y penetrar en el devir para elevarnos en consciencia hacia aquel estado en que se es uno con el Todo, luego debemos regresar para con nuestra acción en nuestro medio ambiente inmediato ayudar a elevar a la humanidad en el exilio. Te invitamos a que te unas en este Trabajo sagrado y que la Sabiduría, la Fuerza y la Belleza sean las expresiones de tu vida.

 

Templo es sinónimo de tiempo, de manera que en los distintos rituales de grado martinista vamos viendo la hora en que deben comenzar los trabajos de construcción y la hora en que se logra la conjunción de los opuestos.

 

Jerusalén es la ciudad del templo, representa el crisol donde se deben fundir las naciones. En su nombre hebreo “urshalom”vemos la indicación de “sitio de paz”, es decir, es en esta paz profunda donde podremos lograr la reintegración. Es en el crisol donde el iniciado va depurando sus ideas hasta alcanzar la unión con la Shej’nah.

 

La letra hebrea “shin” se encuentra en el nombre de Jerusalén (urshalom), en el de Shej’nah, en el nombre de Jesús en hebreo, Yehoshuah, y en la palabra Meshiah (Mesías). Esta shin es la que está marcada en la frente de aquellos que han emprendido el sagrado trabajo de convertirse en agentes de la Unidad.

 

Desde Ur, patria de Abraham, el aliancista, hasta Jerusalem, ciudad de la paz, viaja la idea de reintegración. Para ello, Israel, los conscientes del Señor, deben establecer primero la idea de unidad. Esto lo logran a través de la simbólica construcción del Templo de Salomón en Jerusalem, la novia del cielo, la shej’inah. Nuestra construcción conlleva el logro de la idea de unidad. Todo Israel tiene una Jerusalem celeste.

 

Que mores siempre en la Luz sagrada de la Sabiduría martinista.



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Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: Evaristo Enviado: 18/12/2011 11:04

Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: Tenique Enviado: 18/12/2011 22:26
Námasté.    Tenique.


 
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