"¿Cómo definir al ser humano? La naturaleza inferior y la naturaleza superior están tan inextricablemente mezcladas en él, que resulta imposible decir dónde acaba una y dónde comienza la otra. La Divinidad habita en todos los seres, incluso en los menos evolucionados; la diferencia está en la conciencia. Dios está presente de la misma manera y también plenamente, tanto entre las personas más groseras y las más amorales, como en un Maestro espiritual; pero debido a que estas gentes groseras y amorales no son conscientes de que la divinidad habita en ellas, le impiden manifestarse. De esta forma, hay seres y lugares donde la presencia divina no se manifiesta porque se han cerrado a ella y no la aceptan. Dios existe en nosotros y quiere manifestarse en toda su belleza, su poder, su luz, su amor. Nos corresponde pues a nosotros tomar conciencia de esta presencia y de trabajar para hacerla vivir cada día más intensamente en nosotros."