Esta semana les ofrecemos el tercer Emblema Rosacruz, cuyo nombre es ALTAPETO. Esto puede traducirse como “Yo busco las alturas” o “Yo me elevo”, simbolizando el alma humana que se eleva en pos de Dios, representado por el nombre de JESÚS, hacia el cual se dirige el Corazón Alado. Observen que el Alma es perseguida por un dragón, que representa la totalidad de aspectos negativos, bajas emociones, debilidades y obstáculos que constantemente entorpecen nuestra mente, enturbian nuestro entendimiento e impiden el correcto razonamiento.

El primer Emblema Rosacruz que usamos para meditar – MOLLESCO – nos enseñó que teníamos que ABLANDAR nuestro Corazón, duro como una piedra. El segundo Emblema Rosacruz – CRESCO – nos mostró el fruto del ablandamiento: una tierra fértil en la que crecen espigas de maíz. Esto nos enseñó que nuestro Ser siempre da frutos, cuando es correctamente rastrillado o roturado; que es fértil en obras productivas, y que estas obras son un alimento para las demás personas. Por eso se muestran las espigas de maíz, que permiten alimentar no solamente a uno mismo sino a quienes se nos acerquen.

El tercer Emblema Rosacruz – ALTAPETO – nos dice que debemos confiar únicamente en DIOS. También que debemos elevar nuestra Alma por encima de lo material – que está simbolizado en la imagen por la ciudad. Y que en la materia se encuentran las tentaciones – simbolizadas por el Dragón negro. Y que la única manera de evadir el mundo material, y separarse de las tentaciones es dirigiéndose exclusivamente hacia DIOS, que en la pintura está representado por las radiantes letras de Jesucristo. Dijo Jesús: “Ningún hombre llega al Padre si no es a través de mí”. Mas también dijo “Yo y mi Padre somos UNO”. Mediten sobre ALTAPETO.

III-ALTAPETO, YO BUSCO LAS ALTURAS