Pensamiento del Sábado 17 de marzo de 2012.
"Algunos padres ven morir a sus hijos y están ahí, desesperados,
hundidos, se preguntan: «Pero, ¿por qué?...» ¿Qué consuelo
podrán hallar en las palabras de un sacerdote o de un pastor que
les responderá: «es la voluntad de Dios»? ¿Fue la voluntad de
Dios que su hijo enfermara y muriera?... ¿Es Dios quién ha
querido que una noche, tras haber bebido demasiado con los
amigos, se matara en un accidente de carretera?... ¿Es Dios
quién ha querido que se drogara o se suicidara?
Es comprensible que en su angustia, los hombres y las mujeres
pregunten a religiosos, y también a médicos y psicólogos. Las
respuestas que recibirán dependerán de la calidad de aquellos a
los que consulten. Pero lo que deben saber, es que en las grandes
pruebas, las verdaderas respuestas están en ellos mismos. Así
pues, aunque continúen preguntando a otras personas, si tienen
necesidad de ello, deben esforzarse en buscar en ellos mismos, en
su alma, en su espíritu. Las únicas respuestas capaces de
aliviarles, sólo las obtendrán preguntando a la Divinidad que
vive en ellos. "
Omraam Mikhaël Aïvanhov
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