Según sea el animal que las cause, las lesiones pueden ser más o menos importantes.
De mosquitos:
No tienen ninguna consecuencia pero conviene evitar el recado para que no se inflame.
De araña, hormigas, avispas...:
Habitualmente son leves y sólo causan irritación local de la zona. En casos excepcionales el niño puede ser alérgico a su veneno, pero las consecuencias son generalmente de carácter leve y desaparecen tras la administración de un antihistamínico.
- Examinar la zona de la picadura buscando el aguijón del insecto para extraerlo.
- Lavar la zona con agua y jabón para evitar que la picadura se complique con una infección secundaria.
- Aplicar frío local y lociones antialérgicas.
- Si un insecto ha penetrado en la nariz o en el oído del niño, nunca se intentará extraerlo sino que se matará instilando en el orificio correspondiente unas gotas de aceite de oliva.
Cuando se trata de un niño especialmente alérgico, puede producirse desde una reacción local excesiva hasta una grave respuesta alérgica que puede provocarles la muerte. Se tendrá que utilizar un torniquete, y acudir inmediatamente a un centro médico.
Animales marinos:
Lavar la picadura con agua salada (nunca con agua dulce), evitando friccionarla.
- Eliminar los tentáculos del animal que puedan quedar adheridos a la piel de la víctima, para evitar que el veneno de éstos siga inoculándose.
- Rociar bicarbonato sobre la herida para neutralizar el veneno, o utilizar para ello vinagre.
- Si parecen síntomas de afectación general, evacuar con urgencia a un centro médico.
De escorpión:
Es un animal especialmente peligroso para los niños. La mayoría de las veces sólo se producen síntomas locales leves (inflamación local, sensación de quemazón dolorosa...) pero a veces se provoca una reacción una reacción general caracterizada por vómitos, laxitud, sudor profuso, dolores articulares o dificultad respiratoria.
- En los casos graves, se recomienda la aplicación de un torniquete y acudir directamente a un centro médico.
- En las situaciones leves, el tratamiento se orientará a conseguir calmar el dolor local aplicando compresas empapadas en agua fría.
Mordeduras:
De perro:
Siempre deben ser examinadas por un médico y es preciso controlar al animal para constatar que esté correctamente vacunado.
De gato:
Los arañazos de gato suelen ser inofensivos, pero a veces pueden producir una lesión caracterizada por el enrojecimiento de la zona y la aparición de un ganglio inflamado: en la axila (si el arañazo ha sido en el brazo) o en la ingle (si ha sido en la pierna).