Investigadores del King’s College de Londres desarrollaron un simple test de saliva que, a través de la medición de los niveles de progesterona, puede ayudar a predecir qué mujeres embarazadas afrontan un mayor riesgo de tener un parto prematuro, según publica el British Journal of Obstetrics and Gynaecology. Las mujeres en riesgo tienen niveles de progesterona en la saliva mucho menores.