Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

AYUDA-AMISTAD
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Normas del Grupo 
 Plantas que sanan 
 Terapias Alternativas 
 Foro Consulta 
 Medicina y Salud 
 Reflexiones 
 Leyendas 
 Mundo Animal 
 Nuestras Recetas 
 Poemas 
 Música 
 Humor 
 Gifs y carteles 
 Capilla Virtual 
 ¡¡¡Vamos a estar en el Museo!!! 
 ¿Nos conocemos más? 
 Cumpleaños 
 Mensajes MPGrupos 
 Juegos 
 General 
 MICRO-CUENTOS 
 FIBROMIALGIA 
 
 
  Herramientas
 
General: ACTITUD PARA TENER UN BUEN LUNES
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: Siondra  (Mensaje original) Enviado: 04/10/2010 21:07
Actitud para tener un buen lunes
 

Hoy lo he visto claro. La mejor manera de afrontar el Lunes y el resto de la semana con aquella alegría propia de quien disfruta de la semana.

He parado la alarma, desconectado el snooze y me he dormido. Abro los ojos. Es tarde. Me levanto. Hace un frío de narices. Ducha y desayuno atropellado. Me visto.

Llego al adén. Retraso en el paso de los trenes a causa de un tren defectuoso. Llego a Bank. Circulo por los pasillos hasta el andén de la Northern Line. No puedo entrar en el andén por la cantidad de gente que espera. Pasa el primer tren, el andén se vacía algo y me abro camino. Hace calor, y no es la calefacción (en verano supera los 40 grados). Hay retrasos por “acciones de pasajeros” en tres estaciones. El tren va a estar hasta los topes. Me quito la chaqueta. Llega el tren. Este se va a ir sin mi.

Enlatados

El segundo tren llega, 5 minutos más tarde.Una masa de gente sale. Espero paciente. Es momento de entrar. La gente esperando detrás de mi me mete literalmente en el tren. Aún así me quedo casi en la puerta. Al cerrarse su forma semicircular me golpea en la cabeza. En el vagón no hay sitio para respirar. Alguien está tras de mi aplastado contra la puerta. La mezcla de perfume con el olor humano es terrible (será cierto que en Europa la gente no se ducha cada día).

Primera parada. Moorgate. Medio vagón se baja. Inútil, el sudor ya me cae por la espalda. Me coloco cerca de la puerta para poder salir del vagón disparado. Siguiente parada, Old Street. Salgo. Escaleras. Más escaleras. Aprovecho para ponerme el abrigo aunque todavía estoy sudado. Paso por la canceladora. Más escaleras. Está lloviendo y hace frío. Me subo la cremallera hasta la nariz, no estoy de humor para coger un resfriado. Hoy nada puede salir bien.

Ir en metro al trabajo en Londres es como bajar al Infierno. Cuando llegas a la oficina, entre sudado, malhumorado, cansado, todo se ve negro. Nada puede salir bien. Y ante tan malas expectativas, cualquier cosa que pasa te alegra el día. Y al final dices, bueno, tampoco ha salido tan mal el día. Y todo gracias al metro.



Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados