En estos tiempos, donde lo que se entiende por amor pasa a ser con frecuencia simplemente una emoción que puede adquirirse con el desodorante, los zapatos y el bar apropiado; cabe preguntarse -en vistas de conocer la calidad de nuestros sentimientos- si lo que sentimos ante la presencia de la persona supuestamente amada es amor o simplemente: 

¿Te sudan las manos, tu corazón se acelera y no te sale la voz? 
Eso no es amor ... es nerviosismo. 
¿No puedes quitarle tus ojos o tus manos de encima? 
Eso no es amor ... es lujuria. 
¿ Sientes orgullo de que te vean a su lado? 
Eso no es amor ... es vanidad. 
¿Crees querer a esa persona porque siempre "está allí? 
Eso no es amor ... es miedo a la soledad. 
¿Estás a su lado por que sabes que eso es lo que él ó ella y todos quieren? 
Eso no es amor ... es qué dirán. 
¿Estás a su lado sólo porque toma tu mano y te prodiga cariño? 
Eso no es amor ... es inseguridad. 
¿Permaneces con él ó ella por que dice amarte y no quieres herirlo(a)? 
Eso no es amor ... es lástima. 
¿Estás con él o ella sólo porque al verla, te da un brinco el corazón? 
Eso no es amor ... es sobresalto. 
¿Perdonas sus errores sólo porque él o ella te importa? 
Eso no es amor ... es consideración. 
¿Le dices todos los días que él o ella es lo único en tu mente? 
Eso no es amor ... es mentira. 
¿Sientes estar dispuesto a dar todas tus cosas materiales por él o ella? 
Eso no es amor ... es caridad. 

Puede pasar todo lo anterior pero: Entonces ... ¿Cuándo estás realmente enamorado(a)? 

Cuando ... La persona amada la embarga la tristeza... y esto te hace sufrir y buscas la forma de confortarla, pues sus sentimientos y los tuyos son lo mismo. Respetando la mutua individualidad pero sabiendo -no sólo creyendo- que son uno.
Cuando... Esta ciega e incomprensible conexión te atrae y te mantiene a su lado sin echar de menos a nadie más.
Cuando... Su pena, aunque esa persona sea fuerte ... te conmueve. 
Cuando... La risa brota espontáneamente en labios de ambos precisamente al mismo tiempo.
Cuando... Al mirarse a los ojos pueden tocarse mutuamente el alma.
Cuando... Aparece la certeza de estar completo y aún ser más al estar a su lado.
Cuando... Darías por esa persona tu corazón, tu mente y tu vida. 
Cuando... A quien amas, se va para siempre y sabes que la vida simplemente nunca será igual.

¡Sí, esto es amor!

 
¿Por qué amamos? 
¿Por qué el amor es lo que más buscamos en la vida? 
¿Por qué deseamos tan vehementemente estar enamorados? 

La respuesta es sencilla ... 
Cuando el amor es correspondido, logras ser todo aquello que puedes ser, no sientes pena, agoní­a ni tortura ... vives a la persona amada ... esa persona exalta tu vida y sientes gratitud de tenerla a tu lado; te llena saberla "allí", ni siquiera consideras que pueda haber otra vida sin esa persona .... 
Cuando no esté a tu lado, el sólo pensar en esa persona ... te hace sonreír con ternura; cuando te acaricia o toma tu mano, transmite tal confianza que te sientes capaz de conquistar el mundo; el saberla a tu lado y de tu lado te hace confiar en un futuro optimista y lleno de proyectos. 
Y cuando llegan los desacuerdos, se aceptan con amor y confianza, pues sabes que su amor abarca tanto sus coincidencias como sus diferencias.

Ese divino cóctel de sentimientos es el AMOR. Te hace vivir una sensación tan sublime ... que hace de él un sentimiento ADICTIVO y ... sólo cuando lo pierdes, el vací­o que deja ... te tortura y causa una profunda agonía. Una onda pena. 

"Quien aún no lo ha encontrado, debe seguir buscando ... PUES NADA VALE MÁS LA PENA". 

"Quien lo ha perdido ... sabe que así es. Por eso ... sigue soñando hasta el momento en que llegue otra vez a su vida."
Pero sin buscar afuera. Lo que somos, es AMOR, sólo hay que dejarlo fluir, vivirlo, darlo sin condición que él volverá y nos colmaré de su gracia...