Asimismo, Londres no tenía intención de compartir con Moscú la información que poseía.
Entre los documentos desclasificados y publicados por el servicio ruso de Inteligencia Exterior se encuentra un telegrama cifrado enviado el 2 de julio de 1941 desde Londres a Moscú por Anatoli Gorski, un agente de inteligencia y residente en el Reino Unido con el seudónimo operativo Vadim.
Se trata de las instrucciones que la dirección militar británica pretendía dar al jefe de su misión en la URSS, Frank Noel Mason-MacFarlane."Después de discutir el mensaje de la misión de Moscú, se decidió que el general MacFarlane debía ser informado de la situación actual con respecto a la satisfacción de las demandas rusas de suministros militares y de la línea que debe seguir para responder a los rusos", informó Gorski.
"En cuanto al suministro de provisiones, el general MacFarlane debería retrasarlo bajo la premisa de que la entrada a Rusia a través de Arjánguelsk pronto sería cerrada por los alemanes. En cuanto a la transferencia de información, debe transmitir sólo los datos que los alemanes ya tienen, como las bombas incendiarias. La información sobre el equipo de radio secreto de los cazas nocturnos sólo puede darse en los términos más generales", añadió el agente en su telegrama.
Con motivo de su 100 aniversario, el Servicio de Inteligencia Extranjera de Rusia —SVR— desclasificó una serie de materiales secretos. El libro con la recopilación de estos documentos denominado 'Servicio de Inteligencia Extranjera de la Federación de Rusia. 100 años. Documentos y testimonios' fue presentado al público el 17 de diciembre.