Hoy me a venido a la cabeza un estudio realizado hace años y que mencionaba Deepak Chopra en una de sus conferencias. El estudio lo llevo a cabo la psicóloga Ellen Langer, de la Universidad de Hardvard.

Trataré de resumirlo al máximo posible.

Para llevar a cabo el estudio científico, se eligieron a personas de una edad superior a los 75 años, a las cuales comprobaron los indicadores (biomarcadores) que utiliza la ciencia para comprobar el envejecimiento de una persona (la edad biológica): la tensión arterial, la temperatura corporal, la densidad osea, la proporción de grasa en el cuerpo, la capacidad aeróbica, la capacidad para utilizar el oxigeno, el colesterol bueno, el nivel de hormonas en el cuerpo, el nivel auditivo, la visión, etc…
Una vez seleccionadas las personas, éstas fueron llevadas a un lugar apartado, donde se recreó la forma de vida que ellos habían vivido 30 o 40 años antes. El inmobiliario, el estilo de vida, los periódicos y revistas, las películas, etc… todo estaba ambientado perfectamente en aquella época, los años 50-60.

Al cabo de unas semanas, varios de los biomarcadores utilizados para medir la edad biológica, mostraban un revertimiento en el proceso de envejecimiento. Marcadores como la visión, el nivel auditivo, entre otros, mostraban cambios notables. El resultado era cuanto menos sorprendente, teniendo en cuenta, que no se habían realizado cambios en la dieta, ni ejercicio fisico, ni ningún otra actividad que afecta directamente en estos factores.

Este estudio revela, que nuestra edad, no esta del todo determinada por el tiempo cronológico, que en él tiene un papel muy importante la mente; como nos sentimos y como pensamos se transmite a nuestro cuerpo. Podemos decir que el cuerpo actúa como un fiel reflejo de la mente.

Una de las características de la mente, es que no distingue entre lo real y lo imaginado, todo lo que se proyecta en ella desencadena un impresionante despliegue de información a través del cuerpo.
Podéis probar: Imaginar la acided del limón en la boca e instantaneamente notarás un reacción en las glandulas salivares, del mismo modo, al recordar un momento de estrés, ansiedad o miedo, veréis que vuestro pulso se acelera y como el cuerpo se prepara para estar alerta, reaccionar…

Por ello es importantísimo mantener una mente joven, viva, constantemente realimentada de buenos pensamientos, de buenas sensaciones. Nuestros pensamientos han de ser de salud, de tranquilidad, serenidad, potenciando siempre el valor de nuestras capacidades y no de nuestras “supuestas” limitaciones. Por que la experiencia de vida y la imagen que tenemos de nosotros mismos realmente dan forma a nuestros cuerpos.

Por el contrario, vivir en un estado de nerviosismo, estrés, miedo o ansiedad crónica acelerá nuestra vida y el envejecimiento de nuestro cuerpo, de nuestra edad biológica.

Tampoco debemos dejar de lado otros factores que actúan directamente sobre nuestro envejecimiento como el ejercicio, una dieta equilibrada y la práctica de la meditación.

Creo que cuanto más se investiga en este campo, más nos damos cuenta de que somos una especie de magos, dioses dentro de un cuerpo humano…lo cual me lleva a preguntarme…¿Cuál es el verdadero potencial de nuestra mente? ¿Donde empieza el cuerpo y acaba la mente? ¿Hasta que punto podemos rejuvenecer?