Rev 3:7 Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:

Rev 3:8 Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre.

Rev 3:9 He aquí, yo entrego de la sinagoga de Satanás a los que se dicen ser judíos y no lo son, sino que mienten; he aquí, yo haré que vengan y se postren a tus pies, y reconozcan que yo te he amado.

Rev 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.

Rev 3:11 He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.

Gracia y paz.

Tito Martinez

 

Es en realidad muy interesantes sus opiniones y en la busca de su identidad dentro de las siete iglesias de Apocalipsis...

Hola Estimados

 

con relaciòn a la pregunta, nosotros los cristianos nos identificamos con Cristo, lo que los textos muestran son situaciones doctrinales que afectaban a la iglesia ùnica de Cristo, en estas latitudes, nosotros debemos aprender de estos errores y ejemplos de fidelidad en aquellas iglesias de Cristo (Mi iglesia) y no necesariamente identificarse con una de ellas sino con Cristo siendo imitadores de èl y fieles a su doctrina, sabe yo soy miembro de la iglesia de Cristo y no de una denominaciòn, las iglesias del texto no hablan de pluralidad de iglesias en el sentido denominacional ya que estàn sujetas a Cristo y debemos seguir su ejemplo en aquellas fieles y desechar hoy la desobediencia de las infieles, veamos el presente que esto ocurre de peor manera hoy y debemos ser celosos en cuanto a la fe y defenderla. Jud 3.

 

Estimado esta es una breve respuesta, pero le aconsejo que se identifique con Cristo, obedezca su evangelio , bautizàndose para el perdòn de pecados y serà acepto en la ùnica iglesia que existe es decir la de Cristo.

Pienso qu en todos hay algo de las siete iglesias.

En particular me llama bastante la atención la iglesia de Éfeso:

 

“Conozco tus obras” les dice Jesucristo. La iglesia de Éfeso había progresado ampliamente en el conocimiento de los misterios de Dios. El apóstol Pablo había sembrado con esmero este conocimiento y los elocuentes ancianos de la congregación regaron y cuidaron su crecimiento.

Éfeso se manifiesta como iglesia de gran experiencia, hacia el año 96 d.c. ya tenía testimonio por obras y arduo trabajo. Su conocimiento de la palabra les permitió estar a la vanguardia y desenmascarar a falsos profetas, pudieron probar a los que decían ser apóstoles sin serlo. Esta capacidad de defender con ardiente celo las verdades que registran la Palabra es propia de quienes han sido sellados con fuego –conocimiento- del Espíritu Santo y además han perseverado en su ministerio.

El trabajo arduo de Éfeso ha sido motivado por amor al nombre de Jesús El Mesías. Apocalipsis nos enseña que Jesús tiene un verdadero o nuevo nombre que aún no conocemos (Ap. 3:12; 14:1; 16:12; 22:4), Nombre que Jesús promete dar a saber a quienes superen las pruebas a las que son sometidos. La bendición de saber el verdadero nombre del Heredero del universo pudo haber motivado a la iglesia de Éfeso a trabajar arduamente y sin desmayo en la ampliación de su conocimiento acerca de las verdades ocultas de Dios, de las cuales Pablo también fue mayordomo (1Co. 2:6,7), y que a su vez ministró en Éfeso.

Trabajar arduamente por amor al nombre del Cristo es también permanecer vigilantes con diligencia, para hacer lo que el Señor quiere de nosotros. Dice (1Pe. 4:14) “Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados...”. En igual forma (Heb. 11:26). “Teniendo con mayores riquezas el vituperio de Cristo...porque tenía puesta la mirada en el galardón.”

Podemos decir que la altura del conocimiento de Éfeso corresponde a las revelaciones mesiánicas. La luz de este conocimiento surge de la claridad con que se asume el Antiguo Pacto, y el evangelio de Cristo, con quien logra plenitud todas las Escrituras. El hecho que existiera una sinagoga en Éfeso y muchos judíos convertidos a la fe de Cristo ministrados cuidadosamente por Pablo y por notables ancianos, sirvió para motivar en esta congregación la búsqueda de la encumbrada cima de las revelaciones mesiánicas; además el concilio de Mileto celebrado hacia el año 53 d.c, por Pablo y los ancianos de esta congregación sirvió para que ministrasen con sabiduría. Pablo no abandonó su labor en esta iglesia, estando preso en Roma escribió la carta a los efesios.