SEGUN EL LIBRO DE ENOC EXISTEN 10 CIELOS, AQUI LES DEJO UN EXTRACTO DEL LIBRO DE ENOC QUE HABLA DE LOS 10 CIELOS Y QUE EN CADA UNO DE ELLOS!!!!!
III – Enoc en el primer cielo
1. Y aconteció, luego que Enoc habló a sus hijos, que los ángeles lo tomaron entre sus alas y lo llevaron hacia el Primer Cielo y lo instalaron en las nubes. "Y desde allí mire, y volví a mirar mas arriba, y vi el éter, y ellos me dejaron en el Primer Cielo y me mostraron un muy grande mar, mucho mayor que el mar terreno.
IV – Ancianos y ángeles gobernantes
1. Ellos trajeron frente a mí a los ancianos y gobernantes de las ordenes estelares, y me mostraron doscientos Ángeles, que gobiernan las estrellas y hacen el servicio de los cielos y que vuelan con sus alas y alrededor de cada astro que va asomando.
V – Casas tesoro de la nieve
1. Desde aquí mire hacia abajo y vi las casas-tesoro de la nieve y de los Ángeles que guardan esas
inmensas casas-almacén y las nubes de donde ellos vienen y adonde tornan.
VI - Casas tesoro del rocío
1. Ellos me enseñaron las casas-tesoro del rocío1 así como del aceite de oliva y sus aspectos, como también de todas las flores de la tierra. Mas allá, muchos Ángeles custodian las casas-tesoro de estas cosas, y como están construidas para abrirlas y cerrarlas.
VII – En el segundo cielo
1. Y aquellos hombres me llevaron y me condujeron al Segundo Cielo y me mostraron una oscuridad, mas impenetrable que ninguna oscuridad terrena, y ahí vi prisioneros colgados, mirando, esperando el gran juicio sin limite, y estos Ángeles eran de apariencia negra, mas negra que nada terrenal, e incesantemente lloraban a través de todas las horas.
2. Y yo les dije a los hombres que estaban conmigo: "¿Cuál es el motivo por el cual estos son incesantemente torturados?". Ellos me contestaron: "Esos son los apostatas de Dios, que no observaron los mandatos de Dios, que solo tomaron consejo con su libre albedrío, y se separaron con su príncipe, que también él esta atado al Quinto Cielo".
3. Y yo sentí una gran piedad por ellos, y me saludaron y me dijeron: "Hombre de Dios ora por nosotros al Señor", Y yo les conteste: "¿Quién soy yo, hombre mortal, que pueda orar por Ángeles? ¿Que sé yo donde iré, que me acontecerá, o quien orara por ml?".
VIII – En el tercer cielo
1. Y aquellos hombres me tomaron y me llevaron desde ahí y me condujeron hacia arriba, al tercer cielo. Y allí me dejaron. Y yo mire hacia abajo, y vi el aprovisionamiento de estos lugares, como nunca cosa semejante se había conocido para bien supremo.
2. Y yo vi toda la dulzura de los árboles en flor y contemplé sus frutos, y deliciosos aromas, y todoslos manjares que se preparan con burbujeante y fragante exhalación.
3. Y en el centro de todos los árboles, aquél, el de la Vida, en aquel sitio, sobre el cual el Señor descansa cuando EI va y entra en el paraíso; y este árbol es de inefable virtud y fragancia y luce engalanado mucho más que ninguna cosa existente; y desde todos los lados se ve de color dorado y bermellón y como fuego y cubre todo y ha engendrado toda clase de frutos.
4. Su raíz esta en el jardín al fin de la tierra.
5. EI Paraíso es entre corruptible e incorruptible.
6. Y dos fuentes brotaban enviando miel y leche, y otras dos fuentes manaban aceite y vino, y ellas se dividían en cuatro partes y corrían alrededor, en tranquilo curso, y bajaban dentro del Paraíso del Edén, entre corruptibilidad o incorruptibilidad.
7. Y desde allí seguían su curso por la tierra, y tuvieron retorno en su círculo, igual que otros elementos.
8. Y aquí no existe árbol estéril y todo sitio es bendecido.
9. Y aquí hay trescientos Ángeles muy resplandecientes que guardan el jardín y con un incesante y
dulce cantar y nunca voces silentes, sirven al Señor a través de todos los días y las horas.
10. Y yo dije: "Qué melodioso es este lugar y cuan grato y dulce" y aquellos hombres me dijeron:
IX – El lugar para los justos
1. Este lugar, ¡Oh Enoc!, este lugar esta preparado para los justos, que soportan toda clase de ofensas de aquellos que exasperan sus almas, para aquellos que apartan sus ojos de lo inicuo, y juzgan justicieramente, y dan pan al hambriento, y cubren al desnudo con ropas, y levantan al caído, y ayudan al huérfano herido y que caminan impecables delante del rostro del Señor, y sirven solo a El. Para ellos es preparado este lugar como su eterna herencia.
X – El lugar para los inicuos
1. Y aquellos dos hombres me fueron guiando a la parte Norte, y me mostraron ahí un terrible lugar, y había allí toda clase de torturas, cruel oscuridad y una iniluminada lobreguez. No hay luz ahí, sino un sombrío fuego constante, flameando hacia lo alto; y un ardoroso río, a la vista, y todo aquel lugar por doquiera es fuego, y doquiera es escarcha y hielo, sed y escalofrío, mientras las ataduras son muy crueles y los Ángeles portan irritadas armas, e imponen inhumanas torturas. Y yo dije:
2. "¡Dolor! ¡Dolor! ¡Qué terrible es este lugar!".
3. Y aquellos hombres me dijeron: "Este lugar ¡Oh Enoc! está preparado para aquellos que deshonran a Dios, y que en la tierra practican el pecado contra natura, que es la corrupción de los niños en la forma sodomita; Hacen magia, encantamientos y satánicas brujerías; y quienes se jactan de sus actos impíos, robando, mintiendo, calumniando, envidiando, ejerciendo rencor, fornicación, asesinato; y quienes perversos roban las almas de los hombres quienes viendo al pobre le quitan sus bienes y siendo ricos los atropellan por las mercancías de otros hombres; quienes teniendo medios para satisfacerles la necesidad hacen que el hambriento muera; y teniendo medios para vestirlo desnudan al pobre; y aquellos que desconociendo a su creador se inclinan ante los desalmados, rindiendo culto a dioses, vanos dioses, fabricados por ellos mismos, talladas imágenes que no pueden ver ni oír; aquellos que practican obras impuras. Para todos estos está preparado este lugar, como herencia eterna.
XI – En el cuarto cielo
1. Aquellos hombres me llevaron y me dejaron en el Cuarto Cielo, y me mostraron todos los sucesivos viajes y todos los rayos de la luz del Sol y de la Luna.
2. Y yo medí sus viajes y compare su luz y vi que la luz del Sol es mas fuerte que la de la Luna.
3. Sus círculos y los discos, que siempre están marchando como un viento que pasa con una muy maravillosa velocidad, y no tiene reposo ni en el día ni en la noche.
4. Su transito y regreso está acompañado por 4 grandes estrellas, y cada estrella tiene debajo de ella mil estrellas, a la derecha del disco del Sol, y por cuatro a la izquierda, cada una debajo de ellas contiene 1000 estrellas, que hacen un total de 8000, surgiendo continuamente con el Sol.
5. Y en el día, 15 miríadas de Ángeles lo atienden, y por la noche, un mil.
6. Y seis alados de ellos, salen con los Ángeles antes de que el disco del Sol entre en las finas llamas, y cien Ángeles encienden el Sol y lo ponen a alumbrar.
XII – Los que acompañan al Sol
1. Y yo mire y vi otros elementos del Sol que vuelan y cuyos nombres son: Phoenixes y Chalkydri, maravillosos y estupendos con pies y colas en la forma de un león, y una cabeza de cocodrilo. La apariencia de ello es de color empurpurado, como el arco iris; y su tamaño es de novecientas mensuras; sus alas son como las de los Ángeles. Cada uno tiene doce, y ellos atienden y acompañan al Sol, gestando calor y rocío, como les ha sido ordenado por Dios.
XIII – Las puertas del Sol
1. Aquellos hombres llevaronme lejos hacia el Este y me dejaron a las puertas del Sol, donde el Sol sigue hacia adelante de acuerdo con la regulación de las estaciones y el circuito de los meses de todo el año, y el número de las horas del día y de la noche.
2. Y yo vi seis puertas abiertas y cada puerta tenía sesenta y un stadía y la cuarta parte de un stadium y los medí exactamente y comprendí que su medida era ese tanto a través de la cual el Sol seguía su paso, marchando hacia el oeste, y se hace igual y se levanta a través de todos los meses, y se devuelve de nuevo de las seis puertas de acuerdo con el curso de las estaciones; de este modo el cielo de todo el año se ha terminado después del retorno de las cuatro estaciones.
XIV – Recorrido del Sol
1. Y otra vez aquellos hombres me condujeron hacia los sitios del Oeste, y me mostraron seis grandes puertas abiertas, correspondiendo con las puertas del Este. En sentido opuesto, al lugar por donde sale, el Sol se pone, de acuerdo con el numero de los días 365 y un cuarto.
2. Y así otra vez él baja a las puertas del oeste, extrayendo sus luces, la grandiosidad de su brillar, bajo la tierra, a que la luminosidad de, su corona permanece en el cielo con el Señor, custodiada por cuatrocientos Ángeles, mientras el Sol va rotando en círculo bajo la tierra, y permanece 7 largas horas en la noche; y allí queda la mitad de su curso bajo la tierra, y cuando él vuelve aproximándose al Este en la octava hora de la noche, él trae sus luces, y su corona de resplandores y las llamas del Sol flamean mas que el fuego.
XV – El guardián de la mañana toma forma
1. Entonces los elementos del Sol; llamados Phoenixes y Chalkydri rompen a cantar; Por consiguiente cada ave vibrando con sus alas regocija al dador de la luz, y ellos entonan su canto al mandato del Señor.
2. EI dador de la luz viene para dar luminosidad al mundo entero, y el guardián de la mañana toma forma, esto viene a ser: los rayos del Sol, y el Sol de la tierra se manifiesta y recibe en fulgurante luz para encender toda la faz de la tierra; y ellos entonces me mostraron estos cálculos de los viajes del Sol.
3. Y las puertas por donde él entra, éstas son las grandes puertas de la computación de las horas del año; es ésta la razón por la cual el Sol es una gran creación cuyo ciclo dura 28 años, y comienza de nuevo desde el principio.
XVI – La ruta de la Luna
1. Aquellos hombres me mostraron la otra ruta, la de la Luna, 12 grandes puertas coronaban de Oeste a Este por donde la Luna va y vuelve al tiempo acostumbrado.
2. Y va hacia adentro por la primera puerta, por los lados del Oeste del Sol:
1) Por las primeras puertas, con 31 días exactos. 2) Por las segundas puertas, con 31 días exactos. 3) Por la tercera puerta, con 30 días exactos. 4) Por la cuarta puerta, con 30 días exactos. 5) Por la quinta puerta, con 31 días exactos. 6) Por la sexta puerta, con 31 días exactos. 7) Por la séptima puerta, con 30 días exactos. 8) Por la octava puerta, con 31 días exactos. 9) Por la novena puerta, con 31 días exactos. 10) Por la décima puerta, con 30 días exactos. 11) Por la undécima puerta, con 31 días exactos. 12) Por la duodécima puerta, con 28 días exactos.
3. Y así van a través de las puertas del Oeste en el mismo orden y número que siguen las puertas del Este, y de esta forma cumple con los 365 y un cuarto de días del año solar, mientras el año lunar tiene 354 y quedan faltándole 12 días del cielo solar, que son los aspectos de la luna de todo el año.
4. De este modo, también el gran cielo contiene 532 años.
5. EI cuarto año de 1 día se omite por 3 años, y el cuarto año lo completa exactamente.
6. Por lo tanto ellos son sacados fuera del cielo por 3 años y no son agregados al número de días, porque ellos cambian el compás de los años a 2 nuevos meses mas hacia el final de 2 meses mas hacia la merma.
7. Y cuando las puertas del Oeste se cierran, él regresa y va al Este a las luces, y de este modo el continua día y noche en rededor de los círculos del cielo, que están más bajos que los demás círculos, y corre más veloz que los vientos del cielo, y mas aun que los espíritus, elementos y ángeles volando; Cada ángel tiene 6 alas.
8. Ella tiene un curso séxtuple en 19 años
XVII – El mágico y maravilloso canto de los soldados
1. En el centro del cielo yo vi soldados armados, sirviendo al Señor, con tímpanos y órganos, con voces incesantes, con dulce voz, con un continuo, suave y amoroso y variado cantar, imposible de describir y que enajenaba cada mente, tan mágico y maravilloso era el canto de aquellos ángeles, y yo me deleitaba escuchándolo.
XVIII – En el quinto cielo
1. Los hombres me llevaron hacia el quinto cielo y me dejaron allí, y allí vi muchos e incontables soldados, llamados Grigori, de humana apariencia, y su talla era mayor que aquella de los grandes gigantes y sus caras marchitas, y sus bocas en perpetuo silencio, y no había servicio en el quinto cielo, y yo les dije a los hombres que estaban conmigo:
2. ¿Cual es el motivo que estos seres estén macilentos, y sus caras melancólicas y sus bocas silenciosas y cu l el motivo de que no exista servidumbre en este cielo?
3. Y ellos me dijeron: Estos son los Grigori, que en unión con su príncipe Satanás, rechazaron al Señor de la Luz, y después de ellos siguen aquellos que están sumergidos en gran oscuridad en el segundo cielo, y tres de ellos bajaron a la Tierra desde el Trono del Señor, al lugar llamado Ermon, y rompieron por completo sus votos en el hombro del Monte Ermon. Vieron a las hijas de los hombres y lo buenas que eran, y las tomaron por esposas, pervirtiendo la tierra con sus hechos, que en todo el tiempo de sus años vivieron fuera de toda ley cometiendo vilezas, promiscuando. Así nacieron gigantes maravillosos, grandes hombres y hubo gran hostilidad entre ellos.
4. Y por esto Dios los juzgó con gran discernimiento, y ellos lloraron por sus hermanos y ellos también seran castigados en el gran día del Señor.
5. Y yo les dije a los Grigori: "Yo vi a sus hermanos y sus trabajos, y sus grandes tormentos, y ore por ellos, pero las leyes de Dios los han condenado a estar bajo tierra hasta que el cielo y la tierra tengan su fin".
6. Y yo dije: "¿Por qué motivo esperáis, hermanos, y no servís ante la faz del Señor? Y no han puesto sus servicios delante del Señor, a fin de no violar totalmente a las leyes del Señor".
7. Y ellos oyeron mi advertencia, y hablaron con las cuatro categorías del cielo, y de ahí mientras yo permanecía con esos dos hombres, cuatro trompetas pregonaron juntas a grandes voces y los Grigori rompieron a cantar a una voz, y sus voces lastimeras subieron hasta el Señor conmovedoras.
XIX – En el sexto cielo
1. Y desde allí me tomaron y me dejaron más arriba, en el sexto cielo, y vi ahí 7 congregaciones de ángeles, muy brillantes y muy gloriosos, y sus caras fulgurantes más que el brillo del Sol, relumbrando, sin diferencia alguna en sus caras, o comportamiento, ni en su modo de vestir; y estos ángeles crean las órdenes, y aprenden la salida de las estrellas y la alteración de la Luna y el buen gobernar del mundo.
2. Y cuando ellos ven malignidad, ellos crean mandamientos e instrucción, y dulces altos cantares, y toda clase de cantos de alabanzas.
3. Estos son los arcángeles que están en mas alto lugar que los ángeles, miden toda vida en el cielo y sobre la tierra, y a los ángeles que están a cargo de las estaciones y años, a los ángeles que están sobre los ríos y el mar, y que están sobre los frutos de la tierra, y los ángeles que están sobre toda grama, alimentando a todo, a cada cosa viviente, y los ángeles que inscriben a todas las almas de los hombres, y todos sus hechos, y sus vidas frente a la faz del Señor; en el centro de ellos están seis Fénix y seis Querubines y ángeles de seis alas, y cantan continuamente a una sola voz y no es posible describir su cantar, y ellos se regocijan delante del Señor al pie de su escabel.
XX – En el séptimo cielo
1. Y aquellos dos hombres me levantaron desde aquí y me condujeron al Séptimo Cielo, y allí vi una muy grande luz, y encendidos ejércitos de grandes arcángeles, fuerzas corpóreas, y señoríos, órdenes y potestades, querubines y serafines y seres de muchos ojos, nueve regimientos, la estación de luz Joanit, y me entró miedo y comencé a temblar con gran terror, y aquellos hombres tomaron de mí y me condujeron detrás de ellos y me dijeron:
2. "Ten valor, Enoc, no temas", y me mostraron al Señor a lo lejos, sentado en un muy alto trono.
Porque ¿qué puede haber en el décimo cielo, si el Señor habitaba aquí?
3. EI décimo cielo, es Dios; en la lengua hebrea EI es Llamado Aravath.
4. Y todos los ejércitos del cielo bajaron y colocándose en el décimo escalón de acuerdo con su rango, se inclinaron ante el Señor, y de nuevo marcharon a sus sitios en alegría y felicidad, cantando sus cantares en la infinita luz con suaves y tiernas voces, sirviéndole gloriosamente.
XXI – En el séptimo, octavo y noveno cielo
1. Y los querubines y serafines de pie por doquiera del trono, los de seis alas y los de muchos ojos estuvieron de pie delante de la faz del Señor cumpliendo Su mandato, y cubrieron todo su trono, cantando con suave voz delante de la faz del Señor: "Gloria, Gloria, Gloria, Señor Regidor de los Ejércitos, los Cielos y la tierra están Llenos de tu Gloria".
2. Cuando yo vi todas estas cosas, aquellos hombres me dijeron: "Enoc, de este modo, hasta aquí nos ha sido encomendado viajar a tu lado"; y aquellos hombres se marcharon de mi lado, y desde entonces no les vi.
3. Y permanecí solo al final del séptimo cielo y tuve miedo y caí de frente y me dije: "Triste de mí,
¡qué me ha sucedido! ".
4. Y el Señor envió uno de sus gloriosos elegidos, el arcángel Gabriel, y él me dijo: "Ten valor, Enoc, no temas, levántate delante de la faz del Señor dentro de la eternidad, levántate, ven conmigo".
5. Y yo le contesté y me dije a mí: "Mi Señor, mi alma se ha fugado de mi ser, de terror estremecida", y reclamo a los hombres que me trajeron y que me condujeron a este lugar, en ellos yo confío, y es con ellos que me presentaré ante la faz del Señor.
6. Y Gabriel me levantó como a una hoja llevada por el viento, y me dejó delante de la faz del Señor.
7. Y yo vi el Octavo Cielo, que es Llamado en lengua hebrea Muzaloth donde hacen el cambio las estaciones, de sequía, de humedad, y también de los doce signos del Zodíaco, el cual está más alto que el séptimo cielo.
8. Y yo vi el Noveno Cielo, que es Llamado en hebreo Cuchavim, donde están las moradas
celestiales de los doce signo del Zodíaco,
XXII – En el décimo cielo
1. En el Décimo Cielo, "Aravoth", yo vi la imagen del Señor como hierro candente, hecho para brillar
en fuego, emitiendo chispas, y ellas quemaban.....
Enoc sigue describiendo la grandeza de Dios pero los dejo con la espinita... 