La Reina de la noche -S. grandiflorus, no confundir con las homónimas- es una cactácea poco llamativa y extremadamente rara. Tan rara que se estima que más de un 90% de las S. grandiflorus en los viveros no son S. grandiflorus sino que se trata de especies similares que fueron confundidas con la misma. Si bien es una planta poco llamativa, una vez al año, la Reina de la noche decide ponerse su corona a manera de una extremadamente fragante y llamativa flor de grandes y brillantes pétalos. Al llegar la mañana, la flor producida se marchita y muere. Pero el florecer anual no es algo extremadamente raro en la naturaleza. Quizás el ejemplo más conocido sea el de los árboles de cerezo, tan influyentes en la cultura y el arte japonesas, los cuales, una vez al año, y durante unas breves semanas, florecen en simultáneo.