Prefiero que compartas conmigo unos pocos minutos ahora que estoy viva y no una noche entera cuando yo muera.
Prefiero que estreches suavemente mi mano ahora que estoy viva, y no apoyes tu cuerpo sobre mí cuando yo muera. Prefiero que hagas una sola llamada ahora que estoy viva, y no emprendas un inesperado viaje cuando yo muera. Prefiero que me regales una sola flor ahora que estoy viva, y no me envíes un hermoso ramo cuando yo muera. Prefiero que elevemos al cielo una oración ahora que estoy viva, y no un recordatorio cuando yo muera. Prefiero que me digas unas palabras de aliento ahora que estoy viva, y no un desgarrador poema cuando yo muera. Prefiero escuchar un solo acorde de guitarra ahora que estoy viva, y no una conmovedora serenata cuando yo muera. Prefiero me dediques una sentida oración ahora que estoy viva, y no un poético epitafio sobre mi tumba cuando yo muera. Prefiero disfrutar de los más mínimos detalles ahora que estoy viva, y no de grandes manifestaciones cuando yo muera...