No quería despertar, era una lucha entre el sueño y lo real; sentía el cuerpo cansado y no podía moverme, quería quedarme así entre sus brazos.
Bajo aquel hechizo que me hacia sentir querida, era increíble ningún hombre me había hecho vibrar con sus caricias; su fuego y su pasión consumían toda mi piel como lava ardiente y sus besos me envolvían como una lengua de fuego.
Bajo la oscuridad de la noche prendido a mi vientre, Devoraba mi cuerpo, me bebía de principio a fin; perfilando mis caderas, allí sobre sus piernas al borde de la cama. Sus labios suaves entre mis senos, se deslizaban ansiosos hacia mi ombligo.
Un escalofrío nos unía, nos convertía en una sola piel; mis uñas ascendían y descendían por sus vértebras excitándole, sus ojos cerraba y en su rostro se marcaba la pasión, ... gemía. Contaba cada segundo para no despertar del sueño placentero del amor.
Mis piernas como lazos se amarraban a su cintura, no quería dejarlo escapar....era mío...tan mío en aquel instante; mis brazos rodeaban su cuello, mi lengua entraba en su boca. Unidos en un solo movimiento lo sentía estremecer bajo mi cuerpo.
¡Como se agitaba!, sus brazos tensos me apretaban, estaba bajo mi dominio y le sentía tembloroso... Vibraba mi cuerpo, me sentía llena de su pasión, de su sexo; Cabalgando sobre su cintura, sintiéndome mujer; gastaba la noche.
Un rayo de luz rojizo ilumino mi cara, me hizo despertar sudorosa y excitada; pensativa, agitada, busque el agua fría, ¿Sueño o pesadilla?.Mientras el frío liquido reanimaba mi gesto, mi cara.
De nuevo había soñado con ese hombre que me enloquecía, nadie como él para hacerme el amor, hacerme sentir su tigresa; su fiera salvaje, amándolo, disfrutándolo hasta el ultimo momento. No quiero creer que él solo existe en mis sueños.
Y en mis noches seguiré esperándolo; entre la seda de mi sabanas, en mi cama... Entre el deseo y las ansias de volver a estar entre sus brazos.
De nuevo había soñado con ese hombre que me enloquecía, nadie como él para hacerme el amor, hacerme sentir su tigresa; su fiera salvaje, amándolo, disfrutándolo hasta el ultimo momento. No quiero creer que él solo existe en mis sueños.
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