NO CAMBIES
Durante años fui un neurótico. Era un ser angustiado,
deprimido y egoísta. Y todo el mundo insistía en
decirme que cambiara. Y no dejaban de recordarme
lo neurótico que yo era. Y yo me ofendía,
aunque estaba de acuerdo con ellos,
y deseaba cambiar, pero no acababa de
conseguirlo por mucho que lo intentara.
Lo peor era que mi mejor amigo tampoco dejaba
de recordarme lo neurótico que yo estaba.
Y también insistía en la necesidad
de que yo cambiara. Y también estaba de acuerdo, y no podía sentirme
ofendido con él. De manera que me sentía impotente
y como atrapado.
Pero un día me dijo: "No cambies. Sigue siendo
tal como eres. En realidad no importa que cambies
o dejes de cambiar. Yo te quiero tal como eres y
no puedo dejar de quererte".
Aquellas palabras sonaron en mis oídos como música:
"No cambies. No cambies. No cambies... Te quiero..." Entonces me tranquilicé. Y me sentí vivo.
Y, ¡oh maravilla! Cambié!!!.
Ahora sé que en realidad no podía cambiar hasta
encontrar a alguien que me quisiera, prescindiendo
de que cambiara o dejara de cambiar.
©Anthony de Melo.
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