Los ángeles integran las huestes o ejércitos celestiales, son criaturas puramente espirituales que tienen nombre especial según el oficio que desempeñen.
"Son espíritus, pero no por ser espíritus son ángeles, cuando son enviados, se denominan ángeles, pues la palabra ángel es nombre de oficio, no de naturaleza. Si preguntas por el nombre de esta naturaleza se te responde que es espíritu, si preguntas por su oficio se te dice que es ángel, por lo que es, es espíritu, por lo que obra es ángel".
La aureola que rodea la cabeza de los ángeles es de origen oriental. Nimbo, del latín Nimbus, es el nombre dado al disco que emana de la cabeza de las divinidades. En la iconografía cristiana, el Nimbo o Diadema es un reflejo de la gloria celeste y su origen u hogar, el cielo. Las alas y los halos aparecieron en el siglo I. Las primeras representan la rapidez con que los ángeles se mueven.
En el Nuevo Testamento, los ángeles aparecieron en los momentos claves de la vida de Jesús: Nacimiento, prédicas, martirio y resurrección. Después de la Ascensión, Jesús fue colocado junto al ángel Metatron.
Algunos estudiosos aceptan la posibilidad de que los Reyes Magos fueran ángeles. Melchor, Rey de la Luz; Baltasar, Rey del Oro, Guardián del Tesoro, del incienso y de la paz profunda; Gaspar, el etíope, que entregó el incienso contra la corrupción.
Hacia el final del Renacimiento, el tema de los ángeles no atraía más el interés y permaneció en el olvido durante muchos años.
Desde 1990 la Gran Fraternidad Blanca está limpiando el karma de la humanidad. Como el 50% de este karma ya fue eliminado, confirmamos la aparición de los intermediarios entre ángeles y hombres: gnomos, duendes, silfos, ondinas, hadas y salamandras entre otros Seres Elementales. Son los llamados obreros de Dios, seres que tienen como misión mantener el orden de la naturaleza.
La jerarquía angélica es un tema de discusión. No hay un consenso en cuál es el lugar más alto y cómo desciende. De acuerdo con la cábala hebrea, existen espíritus puros creados por Dios para servirlo y adorarlo. Esta idea es tomada más tarde por el Cristianismo. Curiosamente son también las letras que, de acuerdo a la cábala, forman el sagrado e impronunciable nombre de Dios. Cada especie de estos seres superiores conforman un coro y los nueve coros están organizados en tres jerarquías. Según la tradición Judeo-Cristiana, parte de un punto central elevado y perfecto, que en forma circular y concéntrica se expande hasta el infinito a través de nueve coros angélicos.
Estos coros están ubicados en niveles descendentes, cada nivel tiene tres filas de órdenes:
PRIMERA JERARQUIA: Serafines - Querubines - Tronos
SEGUNDA JERARQUIA: Dominaciones - Virtudes - Potestades
TERCERA JERARQUIA: Principados - Arcángeles - Ángeles
Estas tríadas o niveles tienen distinto grado de sutileza y desde la primera a la tercera varía la frecuencia de sus vibraciones. Es recién a partir de los tronos, en la primera tríada, donde aparece la materia en la composición de los Ángeles, aunque ellos puedan revestirse de materia, cuando entran en nuestra dimensión ya que poseen esta facultad.
La energía divina, desde el estado más puro de luz, comienza su camino de condensación desde el primer grupo hasta el tercero, manteniendo en forma perfecta su conexión con el absoluto y es en esta comunión con la luz, como se expresan los ángeles en una pluralidad de formas.
De estas tres jerarquías, es la tercera aquella con la que por estar más cerca nuestro podemos conectarnos y entre ellos se encuentran los Arcángeles y los Ángeles que están más próximos a nosotros. |