LA ERA DE ACUARIO
En la Era de Acuario lo que contará no será con quién se relaciona una persona sino lo que ella puede hacer por sí misma. Las habilidades personales, el aprendizaje y el carácter se tendrán en gran estima. Era de Acuario la gente obtendrá su estima mediante la auto-aprobación. Cada cual será consciente de su propia divinidad. Cada cual establecerá sus propias metas de auto-desarrollo y servicio. Cada cual se juzgará a sí mismo y se alabará o criticará según lo merezcan sus actos. Puesto que una persona que puede juzgarse a sí misma ya no está atada a lo que piensen los demás.
El símbolo que caracteriza esta Era es la CRUZ DE MALTA que representa la igualdad y evolución de los cuatro cuerpos inferiores en la raza humana.
La influencia acuariana estimula la conciencia de uno mismo. Nos lleva a afirmaciones del tipo "Yo soy hijo de Dios", "Soy valioso y tengo potencial", "Puedo hacer cualquier cosa si trabajo el tiempo necesario con la dedicación suficiente", "Puedo pensar por mí mismo y tomar decisiones". Querremos ser libres para determinar qué pensaremos, qué creeremos, dónde iremos, qué diremos y qué haremos. La libertad individual es el ideal de Acuario. A medida que hacemos la transición de la Era de Piscis a la de Acuario necesitamos reconsiderar el papel que juegan las leyes en la sociedad y pensar seriamente en qué grado estamos preparados para avanzar sin leyes. Las leyes pueden ahorrar a las personas el problema de pensar. En la Era de Acuario se espera de las personas que hayan desarrollado la Luz dentro suyo de modo que no precisen leyes que los guíen. Acuario es una "espiritualidad"; un camino de "expansión de la conciencia". La "holonomía": todo el universo se encuentra regido por un principio de relación recíproca, todo está unido, interconectado, y aún más que eso, cada parte de este universo es en sí misma una imagen de la totalidad; y esto porque el cosmos entero es una unidad compenetrada e influenciada recíprocamente. El todo está en cada uno y cada uno está en el todo. Todos los seres están hermanados y forman una única familia con diferentes grados de evolución. El hombre, no sería más que una parte de ese todo, de esa intrincada y extensa red; un microcosmos que es en sí mismo una imagen acabada de toda la creación. Aquí encuentra su fundamento el monismo de la Nueva Era: en definitiva, todo es el mismo ser, la misma imagen, sin distinción.
En la Era de Piscis la aprobación de las autoridades da a las personas un sentimiento de valía. Por consiguiente, la gente se inclina ante el poder, está de acuerdo con él y se aviene a las leyes dictadas por la autoridad. En la Era de Piscis, la aprobación de los iguales da también a las personas un sentimiento de valía. Ya que los iguales sólo poseen visión física en la Era de Piscis, basan sus juicios en las apariencias. Así que para conseguir la aprobación de sus semejantes la gente se rodea de posesiones materiales ostentosas, atiborran sus mentes con cualquier tópico para la conversación o con murmuraciones de actualidad, aprenden y siguen todas las costumbres y las reglas de la etiqueta. La promulgación de leyes para el gobierno del pueblo es un concepto de Piscis.
El regente de esta Era es el Conde Saint Germain con su Rayo Violeta. Comenzamos una etapa nueva, donde no deben existir autoridades de ningún tipo, ni leyes que no sean la única ley suprema del Amor; el período de la pluralidad de religiones está pasando, nos acercamos a la manifestación plena de la verdad del hombre, del "sí mismo" que es la recuperación de una unidad que primitivamente poseía y de la que ahora está despojado.
El "yo consciente" de cada individuo se encuentra inmerso en una conciencia suprapersonal, común a la humanidad entera, una especie de depósito de experiencias y conocimientos forjados por el conjunto de la humanidad desde sus orígenes, y a los cuales el individuo normalmente no accede de un modo consciente. Este cúmulo de conocimientos se haría accesible habitualmente a través de formas de conocimiento a-racionales como la intuición, los sueños, los símbolos y mitos. Estas formas de "conocimiento" serían funciones propias del hemisferio cerebral derecho. el hombre debe centrar su aprendizaje en el descenso a lo más profundo de su yo, donde ha de encontrarse con sí mismo, con su "yo soy", es decir, el mismo Dios que es parte de cada una de sus criaturas. El "desarrollo de la conciencia crística" lo podemos lograr a través de sanaciones, cambio de creencias y paradigmas bajo las enseñanzas administradas en las conferencias, talleres, entrenamiento, el uso de la PNL, la Hipnosis, Neuroterapia, regresiones…y otras tantas actividades que requieran activar un proceso de autoaceptación y cambio actitudinal. En la Sede de la Organización nos hemos dedicado de lleno a preparnos profesionalmente para brindar Excelencia y Calidad de Vida a las personas que acudan en busca de bienestar personal.
Revisado por Ada Arzola. |