El tiempo es como un rio que todo lo cambia.
Las culturas vienen y van; la faz de la tierra cambia.
La humanidad avanza, evoluciona a marchas forzadas hacia una conciencia más elevada y un corazon abierto.
Cada uno de nosotros influye en las personas que nos rodean. Al despertar, te conviertes en una chispa que enciende a los demás. El individuo afecta a la comunidad....la comunidad afecta a la región...la región afecta a la nacion... la nación afecta al mundo.
El cambio individual precede al cambio global.
Cada uno de nosotros cuenta; cada uno de nosotros contribuye a la belleza del todo. Transformamos el mundo al cambiar nosotros. Y si no hacemos sino ofrecerle una sonrisa a un desconocido o dirigir una palabra amable a alguien necesitado, también así contribuimos a mejorar las cosas.
Asistiremos a un cambio de conciencia que transformara la politica, el ocio, los medios de comunicación, la medicina, el ejercito y el modo en que nos relacionamos unos con otros.
Estamos pasando de explotar y saquear la tierra a convertirnos en sus protectores y guardianes.
La esclavitud, la guerra, la intolerancia y la crueldad que antes se consideraban aceptables en algunos círculos pronto seran recordados por una humanidad despierta como periodos de autentica locura.
Estamos abandonando la infancia y adentrandonos en la madurez.
Las civilizaciones iluminadas solo surgen cuando un numero suficiente de individuos se comporta de manera iluminada.
Nos aguarda el amanecer de nuestro destino.
La misma especie que posee el poder de destruir la vida en este planeta todavía está en condiciones de cultivar la sabiduria y la fuerza de voluntad necesarias para preservarla.
Dan Millman
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