El aragonito es un carbonato cálcico, a partir de los 400 grados se transforma en calcita, mineral en el que se también se puede transformar tras intervalos geológicos de tiempo. Forma parte del esqueleto de muchos organismos (moluscos, corales, etc). Cristaliza en el sistema ortorrómbico. Cristales sencillos o con mancha múltiple dando un aspecto de prisma hexagonal. En formas coraloides, fibroso, estalactitico y pisolitico (concreción calcárea subesférica de diámetro superior de 2 mm con estructura concéntrica). Misma composición teórica que la calcita, pero las diferencias físicas (ausencia de exfoliación) y cristalográficas son muy evidentes, y por eso se decidió considerarla una especie distinta de la calcita. Es un polimorfo del CO3Ca inestable en condiciones ambientales. Se forma en depósitos de baja temperatura, en grutas, zonas de oxidación de yacimientos mineros y fuentes calientes, también puede localizarse en algunas rocas sedimentarias y metamórficas y en muchas minas de galena.
La secuencia de crecimiento del aragonito puede dividirse en tres etapas: Primero, en algunos lugares, el agua se filtra por el suelo y entra en contacto con rocas muy calientes situadas a profundidad. Calentada por esas rocas el agua asciende y acaba saliendo a la superficie, entre burbujeos en fuentes termales. Después el agua de las fuentes termales se enriquece en minerales disueltos, entre ellos el calcio y el carbono. Al evaporarse y convertirse en vapor, precipita estos compuestos en el suelo, que al combinarse con él oxigeno, forma los cristales del aragonito. Los cristales suelen crecer en ramas que tienen un parecido a los corales. En ocasiones este mineral llega a tomar formas globulares o estalactititas.
Todos estos datos técnicos tienen su importancia. En Lemuria y la Atlántida, el trabajar con cristales era considerado una Ciencia y un Arte, combinación de hemisferio derecho e izquierdo, ahora lo sigue siendo, pero hemos de recuperar esos conocimientos que han sido olvidados y que están dentro de los que estuvimos allí y lo practicamos, forma parte de nuestro propio descubrimiento. En el proceso de activación del ADN tenemos acceso a nuestros archivos de conciencia y experiencias de vidas pasadas, es pues recuperar parte de nuestra identidad.
El Aragonito coraloide, como hemos comentado es un Carbonato. Todo ellos tienen una base común, CO3, formando múltiples combinaciones con diversos elementos, Calcio, Magnesio Estroncio, Hierro, Plomo, Cobre, Manganeso, Zinc, etc. Para su formación es necesario ácido carbónico H2CO3 y Agua. Son los maestros de las emociones y las trabajan de las formas más diversas. Mirar la lista: Calcita, Aragonito, Estroncianita, Magnesita, Dolomita, Siderita, Ankerita, Cerusita, Azurita, Rosasita, Malaquita, Smitsonita, Rodocrosita. Todos son carbonatos. Queda muy claro en la manera en que manifiestan sus propiedades.
El Aragonito tradicionalmente ha sido relacionado con la capacidad de decisión, la confianza en uno mismo y la superación de la timidez, pero es necesario ir más allá, enterder la causa.
Ciñéndonos al aragonito coraloide, hemos de diferenciarlo claramente de los otros tipos de aragonito que suelen formar cristales prismáticos estriados de forma hexagonal, de color naranja, rojo, marrón, amarillo, estos tienen otras propiedades.
Inicialmente nos llama poderosamente su extraordinaria ternura. Si no tiene óxidos es de un blanco inmaculado, Suele tener como impurezas un 3 o 4% de Estroncio y cantidades mucho menores de magnesio. En casa tenemos dos ejemplares, uno de ellos de cierto tamaño. Entre 1 y 2 kilos. Cuando llegó quedamos absolutamente fascinados. Enseguida, ese mismo día mostró el motivo. Es como un cristal que refleja al Espíritu, toda esa ternura que percibimos al mirarlo, es el reflejo de nuestro Yo Superior. Una voz dentro nuestro decía “todo esto que ves que te tiene absolutamente fascinado, eres Tu”.
Es el cristal de la apertura total del corazón. Enseña a ver el Amor, la belleza, la compasión, del Ser Crístico, que es nuestra autentica identidad. Abre el camino para la unión, el gran abrazo.
Cuando comprendemos con el corazón, se abren todos los canales para la transformación. Es una experiencia practica, real, supera las barreras mentales y del ego. Este cristal parece decir; “Si te conoces, y crees en ti, en quien realmente eres, puedes cambiar al mundo, despójate de ideas y teorías, se tu mismo, es tu mayor tesoro”. El mensaje lo transmite directamente al corazón.
Los arrecifes de coral son el hábitat después de las selvas con mayor riqueza biológica. Pueden transforman un paisaje yermo y pobre en una explosión de vida y riqueza. La base de todo ello son los corales, creados por pequeños organismos. Esto también nos habla de la importancia del aragonito coraloide. Al cambiar la comprensión sobre nosotros todo se transforma, el mundo ya no es el mismo. Es una explosión de vida y alegría.
Con Amor.
Carlos y Carmen