Tú que te quejas... y opinas
Tú que reclamas lo que no recibes; ¿ya pensaste en lo que no das? Tú que te lamentas porque sufres; ¿ya pensaste en cuanto haces sufrir?
Tú que acusas a la ignorancia; ¿ya evaluaste tus conocimientos?
Tú que condenas el error; ¿ya percibiste cuanto has errado?
Tú que te dices amigo sincero; ¿ya te analizaste con sinceridad?
Tú que te quejas de penurias, ¿ya viste cuanto posees más que los otros?
Tú que criticas el mundo; ¿ya hiciste algo para mejorarlo? Tú que sueñas con el cielo, ¿que has hecho para extinguir el infierno? Tu, que te dices modesto; ¿te sientes orgulloso de parecer humilde? Tú que condenas el mal; ¿has procurado difundir el bien? Tú que te afliges con la pobreza; ¿has usado bien tus riquezas?
Tu a quien le duelen las espinas, ¿has cultivado rosas? Tú que tanto lamentas las tinieblas, ¿has esparcido luz? Tú que te quejas de soledad; ¿has brindado tu compañía a un amigo? Tú que te indignas contra la enfermedad; ¿que has hecho por tu salud? Tú que anhelas la concordia; ¿has combatido la discordia? |