Estamos hechos para decirle al mundo que no hay forasteros.
Todos son bienvenidos: negro, blanco, rojo, amarillo, ricos, pobres, educados, no educados, hombres, mujeres, homosexuales, heterosexuales, todos, todos, todos.
Todos pertenecemos a ésta familia,
ésta familia humana,
la familia de Dios.