Dedica un rato diario a relajarte haciendo algo que te guste y te relaje: un baño de sales, leer, escuchar música o yoga, pero que sea sólo para ti. Es un buen momento para experimentar con actividades nuevas, ¡puede que descubras que tienes un talento oculto! :P
Y si te apetece, vete de compras: maquillaje, ropa, zapatos, complementos, libros, música, bricolaje… ¡Te mereces un capricho!