Una
investigación descubrió el efecto de los routers y la radiación de los
móviles sobre las plantas, dando cuenta que en muchos casos, las
semillas ni siquiera alcanzan a desarrollarse antes de morir.
Gran
revuelo en la comunidad científica está generando un novedoso
experimento realizado por cinco estudiantes de una clase de ciencias de
una escuela en Dinamarca, que descubrió los efectos de los aparatos
móviles y los routers Wi-Fi en el crecimiento de las plantas.
En
un principio se trataba de probar los efectos de los dispositivos
móviles en la concentración de los estudiantes mientras dormían con
ellos cerca de sus cabezas, sin embargo al ver que su escuela no
disponía de los recursos necesarios para las mediciones, decidieron
utilizar algo más a largo plazo, como las plantas.
De esta forma, los estudiantes dispusieron por 12 días de tres bandejas del la especie Lepidium Sativum en
una habitación sin ningún tipo de radiación, y otra con seis de las
mismas bandejas en una habitación distinta, pero al lado de enrutadores
Wi-Fi que según las estudiantes emitían el mismo tipo de radiación que
un teléfono móvil.
Luego
del análisis, en el que la especie examinada fue medida, observada,
pesada y fotografiada, los resultados fueron concluyentes. No sólo no
crecieron, sino que las semillas ubicadas cerca del router murieron, al
contrario de las plantas ubicadas en la habitación “sana”, que se
desarrollaron normalmente.
Ahora,
científicos daneses ya manifestaron su intención de aplicar el mismo
método, pero en un entorno controlado profesionalmente.
Fuente: Mother Nature Network