Misterio, máscaras y rostros ocultos
El experto explica que “ocultar los ojos es ocultar tu interior, porque
nuestra mirada es la parte del cuerpo que más dice de nosotros”.
Cuando tapamos la inmensa mayoría de nuestro rostro podemos
“actuar desde la clandestinidad y el anonimato”, mostrándonos totalmente
ajenos al juicio social de las personas que nos pueden conocer.