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Con precio de sangre
"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que rodo que en él cree, no se pierda más tenga vida eterna (juan 3:16) DIOS SABE SU GRAN NECESIDAD El pecado arruina toda vida humana. El pecado está en nosotros es parte de nosotros El pecado condenará un alma al infierno para toda una eternidad. Dios habla de la gran necesidad de ud.en las palabras siguientes: "Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios" (Rom.3:23) "Ciertamente no hay en la tierra hombre tan justo, que haga el bien y nunca peque"(Ecle.7:20) "He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecaré, esa morirá (Eze.18:4) ¡Dios ama al mundo, le ama a ud.! Habiendo visto a todos los hombres bajo pecado y condenándose a la destrucción eterna por esa causa, Él expresa su amor dando a su unigénito Hijo amado para llevar el castigo del pecado, el cual es la muerte. "Pero Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Roma. 5:8) JESUS SE DIO A SI MISMO No solamente fue el amor de Dios por ud. tan grande que Él dio a su Hijo, sino que el amor del Hijo por ud. fue tan grande Él se dio a si mismo. "Pues hay un sólo Dios, y un sólo mediador entre Dios y los honbres: Jesucristo, el cual se dio en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo" (1Timo.2:5-6). LO QUE SU MUERTE SIGNIFICA En su muerte Jesús tomó el lugar del pecador, Él llevó el tremendo juicio de Dios por el pecado para poder atraerlo a ud, a Dios. "Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros seamos justicia de Dios en Él" (2Corin.5:21) EL LE SALVARA A UD. Ahora mismo el Salvador quiere salvarle. Él murió en lugar de ud., espera que ud, descanse su alma en la obra que Él ha hecho por ud. "Jesús dice: Yo soy la puerta: el que por mí entre será salvo; entrará y saldrá, y hallará pastos" (Juan10:9). UD, PUEDE SER SALVO AHORA Habiendo comprendido el precio que Dios paga por ud. ¿cómo puede seguir sin recibir a su Hijo cómo a su Salvador personal? ¡Aceptelo a Él en este mismo momento!. "Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: aunque vuestros pecados sean como la grana, cómo la nieve serán emblanquecidos; aunque sean rojos cómo el carmesí, vendrán a ser cómo blanca lana" (Isaías1:18
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