Adoración
"Más yo por la abundancia de tu misericordia entraré en tu
casa; Adoraré hacia tu santo templo en tu temor" Salmo5:7.
La adoración es un estilo de vida. Cada uno de nosotros
debemos ser adoradores.
El salmo dice que por la abundancia de la misericordia de
Dios podemos entrar en su casa (a su presencia). Después
de que Jesucristo hizo el sacrificio redentor en la cruz, por
medio de su sangre preciosa es que podemos entrar al
Santuario de Dios.
"Y el Dios que resucitó de los muertos a nuestro Señor
Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del
pacto eterno, os haga aptos en toda obra buena para que
hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo ,que es
agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria
por los siglos de los siglos" Hebreos 13:20-21.
El versículo anterior nos dice que por la sangre del pacto
eterno. Y que por medio de su sangre seremos capacitado
en todo lo bueno para hacer su voluntad. Eso es ser
adoradores. la voluntad de Dios es que todos los hombres
sean salvos. También la voluntad de Dios es que seamos
adoradores. Por eso Él anda buscando adoradores.
Cuando Jesús habló con la samaritana mencionó sobre la
adoración.
"Más la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos
adorarodes adorarán al Padre en espíritu y en verdad;
porque también el Padre tales adoradores busca que le
adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoren, en espíritu y
en verdad es necesario que adoren" Juan 4:23-24.
En estos versículos hay una clave para adorar como se
debe. Significa que no toda la adoración o lo que muchos
creen que es adoración es bien recibida por Dios. Para ser
verdaderos adoradores hay un requisito: SER GUIADOS
POR EL ESPÍRITU SANTO.
La palabra Shajah en Hebreo significa adorar, postrarse,
bajarse, inclinarse, llegar a Dios en adoración. Es un acto
de humillación, de doblegarse ante el Dios Único Eterno.
Adorar no es cantar. Adorar es más que una alabanza, es
más que postrarse en un momento preciso. Adorar significa
mi manera de vivir adorando a Dios en todo momento.
Como la adoración es para Dios, no podemos engañarlo.
Se puede realizar cualquier actividad, sea un mensaje, una
oración, una alabanza, una danza, hasta una pantomina, que
si no es dirigida por el Espíritu Santo, simplemente sería un
acto protocolario, sin sentido y vacio para Dios.
Podemos tener todos los elementos necesarios para hacer
algo creyendo que vamos a agradar a Dios, pero sin
humillación, sin rendición ante su presencia es sólo un acto,
que puede pasar una línea que oofenda a Dios, como el caso
de los hijos de Aarón.
"Nadab y Abiú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su
incensario, y pusieron en ellos fuego,y sobre el cual pusieron
incienso, y ofrecieron fuego exraño delante de Jehová, que él
nunca les mandó. Y salió fuego de delante de Jehová y los
quemó, y murieron delante de Jehová" Levítico 10:1-2.
En el caso de Nadad y Abihú no furon guiados por el Espíritu
Santo. Por eso nuestra bendición es que podemos entrar al
Santuario de Dios (salmo5:7) y poder adorale por su Santo
Espíritu, dirigido por su presencia (Hebreos 13:20).
Por eso la Escritura nos exhorta a caminar, andar siempre
guiados por el Espíritu Santo.
"Si vivimos en el Espíritu, andemos también en el Espíritu"
Gálatas 5:25.
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