La muerte que genera vida
"Jesús le respondió diciendo: Ha llegado la hora que el Hijo del Hombre sea glorificado. De cierto, de cierto os digo que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere queda solo, pero si muere, lleva mucho fruto" Juan 12:23-24.
"Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera. Y yo, si soy levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo" Juan 12:31-32.
"Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según Su grande misericordia nos ha regenerado para una esperanza viva, mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos" 1 Pedro 1:3.
El Señor Jesús cayó en la tierra y murió para que Su elemento divino, Su vida divina, fuera liberada de la cáscara de Su humanidad, para producir muchos creyentes en Su resurrección (1Pedro 1:3), tal como un grano de trigo que cae en tierra para liberar su elemento de vida y brota de la tierra para llevar mucho fruto, es decir para producir muchos granos. En lugar de una calurosa recepción, el Señor prefería caer en tierra y morir como un grano de trigo, para así poder multiplicarse en muchos granos a fin de constituirse en la Iglesia. El Señor, como grano de trigo que cae en tierra, perdió la vida de Su alma al morir para poder liberar Su vida eterna en resusección a los muchos granos.
En el capítulo doce de Juan la muerte del Señor no se revela como la muerte redentora (como en 1:29), sino como la muerte que produce y genera. Según este capítulo, el Señor al morir quebró la cáscara de Su humanidad encarnada para poder llevar a cabo Su propósito triple: (1)producir los muchos granos y atraer a todos los hombres a Sí mismo (vs. 24-32); (2) liberar el elemento divino, que es la vida eterna vs. 23-28); y (3) juzgar al mundo y echar fuera a su príncipe Satanás (v.31).
http://www.gabitogrupos.com/fuente-de-vida/reflex_pastorbatista.php
|