Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; tiempo de matar, y tiempo de curar;
Tiempo de destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar;
Tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar; tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar;
Tiempo de mar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz.
Eclesiastés 3.1-8
Dios tiene todo ordenado con un tiempo preciso, a veces nos desesperamos pero el tiempo de Dios no se puede ni adelantar y menos atrasar. Lo mejor para nosotros es lo siguiente:
Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará
Salmos 37.5
Quizá estemos pasando por un momento de esos, en donde estamos siendo presa de la desesperación, los días han pasado, los meses ya se fueron, los años vienen uno tras u otro, ¿Y mi respuesta?, ¿Cuánto tiempo he de esperar mas?, me pregunto.
En mi vida cristiana he tenido momentos en donde no he visto aun cumplidas las promesas que Dios me ha dado, en mas de alguna vez me pregunte del porque no las veía y en alguna ocasión quizá hasta me desespere. Pero Dios ha sido tan lindo que después de varios años me ha moldeado esa área de mi vida, la de saber esperar su momento.
El otro día platicaba con un pastor y le hacia ver que no me preocupan que las cosas que Dios me ha prometido no se cumplan rápido, y le decía que no me preocupaba, porque se que al final se terminaran cumpliendo, tarde o temprano llegara, en el tiempo de Dios y bajo sus estándares.
Y es que es lindo cuando se tiene la confianza necesaria para saber que si no es ahora, podrá ser mañana y sino, habrá mas tiempo para poderla recibir, pero de que la recibo, la recibo, y es que Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta, eso me da la paz de saber que El cumplirá lo pactado.
¡Eso si!, parte de que Dios cumpla con lo pactado será el hecho de que yo también cumpla con lo pactado, ya que muchas veces nosotros queremos que Dios sea fiel en las promesas que nos ha hecho, pero nosotros no queremos ser fieles a las promesas de santidad y servicio que le hemos hecho.
Hablo de que Dios cumplirá su promesa, pero anhela de nosotros que seamos fieles y no nos desesperemos, que mantengamos el ritmo espiritual igual o mejor que el que teníamos el día que se nos prometió eso.
Las dudas llegaran, pero la duda no es compatible con la fe, la verdadera fe echa fuera la duda y no le da cabida. Si hay duda en tu vida es señal de que algo anda fallando, de que necesitamos activar la fe, esa que nos lleva a creer lo que es difícil creer.
El desesperarse es señal de duda, pues una persona que se desespera es porque esta dudando de que lo prometido se pueda cumplir, en cambio la fe, lo espera hasta el último minuto, no se desespera pues sabe que tarde o temprano la respuesta llegara.
Dios cumplirá, te lo aseguro que cumplirá, nada mas no debemos desesperarnos, ni tomar decisiones precipitadas, aun cuando ya no podamos mas, debemos esforzarnos mas, sacar fuerzas de donde no las hay y seguir esperando, pues la desesperación llega casi siempre cuando ya estamos a punto de recibir su respuesta, pero la desesperación nos puede llevar a alejar mas la respuesta de Dios, así que mas vale no desesperarnos y confiar ciegamente en que la respuesta llegara, porque Dios lo ha prometido y porque yo le creo, tu le crees y todos los buenos Cristianos le creemos a El.
Dios actúa en un tiempo muy diferente al nuestro, no queramos medir la respuesta de Dios por nuestro tiempo, midámosla y asimílemola en el tiempo de Dios, pues El la da cuando cree que es el momento PERFECTO.
Gracias hermanita Ana Maria por tu bello mensaje.
Dios siempre estará siempre contigo.
Gracias hermanita por compartir tan bello mensaje lleno de amor de Dios.
GRACIAS POR TU AMISTAD, FELIZ DIA.
Hermes Sarmiento G.
De Colombia
Cristiano católico