Cristo es nuestro nuevo Marido
"Así que, en la vida del marido se uniere a otro varón,
será llamada adúltera; pero si su marido muriere,
es libre de esa ley, de tal manera que si se uniere
a otro marido, no será adúltera. Así también vosotros,
hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el
cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que
resucitó de los muertos, a fin de que llevemos
fruto para Dios" Romanos 7:3-4.
Ahora podemos entender claramente quién es el viejo marido: nuestro viejo
hombre. Y la esposa es nuestro nuevo hombre regenerado: la ley fue dada
para el viejo hombre, pero dicho hombre, el viejo marido murió. Ya que el
viejo marido está muerto, yo como su esposa quedo libre de su ley. Pablo
dice que la ley del marido sujeta a la esposa mientras su marido vive. Pero
cuando el esposo muere, la esposa queda libre. nuestro viejo marido era
nuestro viejo hombre, pero ahora somos el nuevo hombre regenerado. Ya
que la ley fue dada al viejo marido, y puesto que Él murió en la cruz,
estamos libres de Su ley. Ésta es la razón por la cuál ya no estamos bajo
la ley. El hombre regenerado, debido a la muerte del viejo hombre en la
cruz, es ahora libre de la ley de éste.
Ahora estamos casados con Cristo, quién es nuestro nuevo marido. En
(2 Corintios 11:2), Pablo también dice que nos desposó con un solo
esposo. Los creyentes sean hombres o mujeres, son seres regenerados
y como tales forman parte de. ya que Cristo es nuestro marido,
debemos depender de Él y tomarlo como nuestra cabeza. Si hacemos
esto, llevaremos fruto para Dios en resurrección y le serviremos en
novedad del Espíritu. No andaremos más en la carne, sino en la
novedad del Espíritu.