Somos libres de la cautividad
"Haz volver nuestra cautividad, oh Jehová, como los arroyos del
Neguev." Salmos 126:4.
La revelación en su vida es progresiva. ¡Dios está dispuesto a
llevarlo fuera de la cautividad, por el camino de los sueños!
Estará reflejando el reino y la gloria de Dios. El Dios que vive
dentro de usted es más que una ayuda, su presencia revela
gracia y amor.
Las naciones, la gente hablará de usted: "Yo lo conocía, yo sabía
cómo él/ella era." la gente va a hablar de usted, la gente verá a
los que tienen problemas como los que usted tuvo y le dirán: "Te
recomiendo que hables con él/ella que no sé cómo lo hizo pero
está totalmente diferente." ¿Cree usted que hoy todo puede
ocurrir en su vida? Si lo cree diga: ¡Soy libre de la cautividad!.
"Los que sembraron con lágrimas con regocijo segarán". Hay
cosas que usted tiene que hacer que le harán soltar lágrimas,
pero lo conectarán con el regocijo. Declare: "Voy a traer las
gavillas, mis manos estarán llenas de la plenitud de Dios!" Dios
quiere mostrar Su gloria y Su esplendor, y lo hará a través de
usted. Aquí está la clave para salir de la cautividad. Declare:
"¡Voy a cosechar con mucho regocijo y mis manos estarán llenas
de gavillas!" ¿Cuál es la clave? Qué usted esté sembrando.
Mire algo interesante, tiene que sembrar la semilla de acuerdo
con la Palabra, aún en medio de la cautividad. No se trata de
decirle al Señor: ¿Viste la situación que estoy pasando? ¡No me
está alcanzando para el diezmo! ¿Para qué le va a explicar todo
eso si Dios conoce su corazón? En el proceso que tiene con
usted quiere sacarlo de la cautividad. Ahí se regocijará su
corazón. Hay algo en común entre las lágrimas y el regocijo:
¡su semilla de fe! Y hay algo para cambiar las lágrimas: ¡usar su
semilla de fe! Al plantar con lágrimas, cosecharemos el fruto
de esa semilla con regocijo. ¡Al dar la semilla, Dios lo sacará
de la cautividad con regocijo!.
Oración: padre, hoy me declaro libre de toda cautividad. Seré
sembrador aún cuando todavía esté en medio de ella porque sé
que al salir me espera la bendición en abundancia. Gracias, en
el nombre de Jesús, amén.