para
Ser de un mismo sentir
"Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se
escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las
Escrituras, tengamos esperanza. Pero el Dios de la paciencia y la
consolación os dé entre vosotros un mismo sentir en Cristo Jesús"
Romanos 15:4-5.
Al recibir a los creyentes, necesitamos esta paciencia y consolación;
también, necesitamos soportar sus debilidades. Además necesitamos
ser alentados con la esperanza que ellos puedan mejorar y ser
fortalecidos en la fe por la gracia del Señor. Al recibir a los creyentes
más débiles, debemos saber que nuestro Dios es el Dios de la
paciencia y la consolación, quien puede darnos la paciencia con que
podemos soportar las debilidades de los demás y animarnos con lo que
Él puede hacer en ellos por Su gracia. Al ser alentados así por nuestro
Dios, entre nosotros tendremos el mismo sentir según Cristo Jesús, y
no basados en ninguna otra cosa. Ya que hay un sólo Cristo Jesús, si
somos según Él, tendremos el mismo sentir entre nosotros. Sin
embargo si nuestra mente se basa en enseñanzas, conceptos, dones,
prácticas religiosas, o algún otro asunto semejante, estaremos
divididos.
Ser conformes a Cristo es la única forma en que podemos tener un
mismo sentir. Para recibir a los creyentes de acuerdo con nuestras
enseñanzas, conceptos, dones, o prácticas religiosas, no se requiere
ninguna paciencia ni consolación con esperanza. No obstante para
recibir a los creyentes según Cristo, se requiere cierta paciencia
y consolación con esperanza, y el propio Dios de la paciencia y de la
consolación es el nos lo suministrará, siempre y cuando procuremos
guardar la unidad y luchemos por la edificación del cuerpo.
Pastor Jaime Batista Cortes
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