Icono de la Resurrección
"Cristo liberador, anuncia el Evangelio a los cautivos,su palabra sobre la salvación es ya, un acto que salva:
"Haz roto los cerrojos eternos que retenían a los cautivos"
En el icono,
Cristo drestruye con sus piés las puertas del infierno.
En el centro del icono salta Jesús,resplandeciente de luz,Dueño de la Vida,lleno del dinamismo del Espiritu Santo e irradiando la energía divina.
Pero su rostro impregnado de una infinita ternura,domina con fuerza ese torbellino liberador.
La fuerza de su gesto,e
ésta violencia que se apodera de los cielos y atravieza el firmamento, es acentuado con fuerza por el movimiento de su manto flotando.
El espacio azul que le rodea (mandorla) constituye el espacio celeste,sembrado de estrellas.Él ,está vestido de luz,atributo del cuerpo glorificado y simbolo de la Gloria divina.
Cristo está vestido de Rey, es el Señor,
pero su solo poder es el Amor crucificado y el poder y la fuerza invencible de la Cruz.
Con un movimiento poderoso de sus manos,arranca de la negrura de los abismos
a Adan y Eva,sorprendidos.
Es el encuentro sorprendente y emocionante de los dos ADAN.
Ahora coinciden y se identifican, no en la humillación de la Encarnación,sino en la Gloria de su Retorno.
El que dijo a Adan:"¿Dónde estás ? (libro del Génesis) ha subido en una Cruz para buscar al que estaba perdido.
Ha bajado hasta el fondo de las sombras de la muerte(nuestros infiernos) diciendo:
"¡ Ven, pués, mi imagen y semejanza !"
Los grupos de derecha y de izquierda-elementos constitutivos de Adan-la Humanidad-
Son los justos,los profetas:
A izquierda los reyes David y Salomon, Daniel y Juan Bautista.
A derecha,Moisés y otros personajes del Antiguo testamento.
Entre la bajada a los infiernos y la aparición de Cristo resucitado,se situa un misterio
rodeado de silencio,absolutamente inaccesible a los ojos humanos.
Si Dios no puede salvar al hombre sin él,
tampoco puede salvarlo sin su participación activa,sin sudor de sangre, y el "hágase"
de Gethsemaní (Huerto de los Olivos, y vivencia de la Agonía de Jesús)
"He terminado la obra que me encomendastes y ahora glorifícame,Padre,a tu lado,
con la Gloria que yo tenía a tu lado antes que el Mundo existiera" (Jn.17/4-5)
Extraido y adaptado de"El Icono,Teologia de la Belleza,de Paul Evdokimov)