Embrujo
Una atracción misteriosa entretiene
la mente algo brumosa, sosegada,
es un embrujo, pasión concentrada
se dibuja, se aleja, se va y viene.
Fascinación oculta que me tiene
embelesado, con hecho punible,
por el ardor pasional imposible
que la acción del sentido me detiene.
¡Ay! del amor que ayer quedó encendido
con fuego y sentimientos pasionales,
en el corazón suenan pedernales
viendo en su amor mi corazón fundido.
De la hembra en sus brazos soy el reo,
ansiedad de su sexo la riqueza
desvarío que mi corazón reza
por esta mujer en que mi amor veo.
Félix Abad Sánchez