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En el divagar de las noches me encuentro
a veces las brumas del tiempo
dejan una estela de tristeza en mi pecho.
Simples silencios
acompañan mis desvelos,
simples destellos
en mis noches de lunas llenas
veo a lo lejos,
inalcanzables y deseables
como todos los sueños que atormentan mi alma.
Nado hacía un mar de incógnitas,
nado contra corriente,
en busca de esa felicidad
que todos deseamos
pero que unos pocos privilegiados sienten.
Seguiré en mi peregrinaje
hacía ese lugar en ninguna parte
en donde quizás allí
pueda perderme y sumergirme
en un inmenso mar de corales brillantes
y felicidad constante..
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