Como congelar alimentos: La guía definitiva
Congelar los alimentos puede ser una manera conveniente para almacenar el exceso de comidas que puedes consumir en una fecha posterior, sin embargo, es importante almacenar cada tipo de alimento de una manera determinada para garantizar su frescura y calidad.
También hay medidas que puedes tomar para evitar que la comida se queme por la congelación y asegurarte de que mantiene su textura.
Continua leyendo para aprender como puedes con eficacia y seguridad congelar los alimentos.
Condiciones generales
Los alimentos deben estar sellados herméticamente. Si el alimento está expuesto al aire en su envase, hará que el alimento se seque y se queme por congelación.
Coloca los alimentos en bolsa de calidad destinadas para este propósito o en recipientes de plástico. Como alternativa, puedes envolverlos con papel aluminio.
Exprime el aire adicional de las bolsas y envases de plástico antes de sellarlos.
Deja suficiente espacio para que la comida se expanda si vas a almacenar líquido o un alimento que contenga jugo o salsa.
Asegúrate de etiquetar y fechar todos los alimentos congelados.
Los alimentos recién cocinados, tibios o calientes, deben enfriarse antes de la congelación. Esto evitará que los alimentos retengan humedad durante el proceso de congelación. Es importante destacar que lo ideal es hacer que el alimento se enfríe rápidamente.
Etiqueta y fecha cada contenedor. Esto te ayudará a identificarlos después de que se han congelado, y también ayudará a mantener un registro de las fechas en que fueron colocados en el refrigerador originalmente. Coloca etiquetas adhesivas en cada contenedor o usa un marcador permanente para marcar cada bolsa de plástico.
Almacena los alimentos de modo que se congelan a un ritmo acelerado. Cuanto más rápido los alimentos se congelan, mejor conservarán su sabor y frescura al descongelarlos. Esto significa evitar la congelación de grandes cantidades de comida a la vez, mejor dividir en tandas.
Empaca la comida en porciones pequeñas para que se congelen más rápido, especialmente si vas a congelar grandes platos, como guisos. Esto también significa que se descongelarán más rápido, y es más fácil unir paquetes pequeños (usar solo lo que vas a consumir), que dividir un paquete grande y dejar residuos.
Coloca los alimentos en el congelador con espacio entre ellos. Esto permitirá que el aire frio circule alrededor de los alimentos de manera eficiente y ayude a que se congelen a un ritmo acelerado.
Congelar verduras
Créalo o no, las verduras bien congeladas duran entre 3 y 6 meses. Si se hace bien, conservarán todo su sabor y apariencia.
Hierve determinadas verduras antes de congelarlas. Este método evitará que las enzimas presentes en los vegetales causen la pérdida de color y sabor.
Lleva una olla con agua a hervir, a continuación, coloca pequeñas porciones de verduras en el agua hirviendo.
Deja hervir las verduras por la cantidad de tiempo apropiada, a continuación, transfiere las verduras inmediatamente a un recipiente con agua helada.
Seca las verduras con una toalla de papel, para luego guardarlas en bolsas o recipientes en el congelador.
Congelar frutas
Guarda la mayoría de las frutas en el congelador durante 8 y 12 meses. Las frutas cítricas conservan el sabor y la apariencia entre 4 y 6 meses.
Lava y corta la fruta antes de la congelación. Esto ayudará a mantener la frescura de la fruta y evitar que se oxide en el congelador..
Congelar pescado
Corta el pescado grande o todo en pequeñas porciones. Esto conservará la frescura del pescado en general y te dará la capacidad de limpiar y destripar el pescado entero antes de la congelación.
Crea una capa protectora de hielo para los peces. Una capa adicional de hielo en el pescado ayudará a garantizar su frescura y eliminar los olores que los peces puedan emitir durante la congelación.
Retira el pescado del congelador después de que se ha congelado por completo, entonces lo sumerges en agua antes de volver a congelar. Esto permitirá que una nueva capa de hielo se forme y cubra el pescado.
Congela el pescado por un máximo de 3 meses. Si son ostras, se pueden almacenar en el congelador hasta por 6 meses.
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