La palabra compromiso, según la Real Academia Española, significa “obligación contraída”, pero al consultar la palabra comprometido: “que está en riesgo, apuro o situación dificultosa”, podemos (debemos), si relacionamos esta definición con nuestras actividades diarias y maneras de hacer las cosas, pensar en otros significados que tienen que ver con esta palabra, como por ejemplo, llegar temprano a una cita, llamar a la hora indicada, cumplir los acuerdos en tiempo y forma, terminar lo que comenzamos, cooperar con nuestros compañeros(as), ser empático(a), ser responsable, trabajar en equipo, decir la verdad (o tratar de no decir mentiras), tirar la basura en su lugar, tener el valor de decir lo que uno quiere en el momento justo, entregar todo sin esperar nada a cambio, hacer las cosas bien, de buena manera y a la primera, etc.
Es así pues, que podemos encontrar muchas ideas para referirnos a lo que palabras como ésta implican cada vez que nos referimos a alguien como una persona comprometida, responsable, asertiva, etc. Podemos estar comprometidos con la vida, con nuestro trabajo, pero el compromiso más grande siempre será con nosotros mismos, y si partimos de ahí, podremos comprometernos con la vida y todo lo que hagamos.