
Sé consciente de ello en todo momento: va en serio, no se trata de un ensayo, no hay repetición, no hay segundas ediciones...
Pero no por ello acabes viviendo una vida gris y anodina, apagada y triste, temerosa de su propio final. Al contrario, que sea única e irrepetible, que sólo la puedas disfrutar una vez solo la hace más especial y más valiosa. Tan valiosa que no puede ser desperdiciada.
Aprovecha bien el tiempo que te ha sido dado y sé consciente de lo que haces con él en todo momento. Vive y comparte con plenitud todos los minutos de todos tus días.

| | | | | |