Cosas que tienes que saber sobre el chico del delivery
¿Amas pedir comida?. Si eres cliente habitual de un lugar, estos son consejos que pueden ayudarte a recibir un mejor servicio de entrega.
Esto es lo que el chico del delivery desea que sepas, o no, antes de llamarlo.
1 – Es comida, no un compromiso de por vida. Hay otras líneas sonando, así que elije qué vas a comer y los ingredientes antes de llamar. Mantente preparado para escuchar: “No tengo eso”, y tomar una decisión rápido.
2 – Saben cuando los niños están llamando y haciendo bromas. Ellos no pueden ocultar sus voces muy bien. Los restaurantes inteligentes bloquean el número telefónico, los tontos no.
3 – Los accidentes pasan. Si se cae la comida en el camino, lo más probable es que el chico del delivery sacuda el paquete para deslizar ingredientes y volver a poner todo en su lugar.
4 – Paciencia. Se tarda por lo menos 30 minutos en cocinar bien cualquier masa. Y luego tiene que llegar a tu casa.
5 – Un chico bajando de una bicicleta o moto, y tocando una puerta con comida en la mano. Es como gritar: “¡Róbenme!, tengo comida y dinero”. Por eso no entregan en algunos barrios.
6 – El chico del delivery es un ser humano. Si lo ves empapado y tiritando bajo la lluvia, no es agradable que le cierres la puerta en la cara mientras vas a buscar un centavo entre los cojines del sofá.
7 – Usa tus modales. Al abrir la puerta deja todo lo que estés haciendo, cuanto antes puede irse mejor para ambos.
8 – Los chicos de delivery sin duda prefieren que cuando abras la puerta tengas puesta una camisa, y sin duda unos pantalones.
9 – Se aconseja dejarle un 10 a 15% de propina. Si pides un montón de pizza para una fiesta o algo así, pero le dejas $1, bueno, la próxima vez que le pidas comida te puede “pachar un achidente”.
10 – Todo chico de delivery sabe que las mejores propinas en realidad provienen de personas de ingresos medios/bajos, que saben lo que cuesta ganarlo.
11 – El chico se acuerda de todos los clientes que no le dejan propina. Él no va a hacer nada que ponga en peligro su trabajo, por eso sacudir la gaseosa en la próxima entrega no es razón para despedirlo.
12 – No puede esperar para siempre. Te llamará a la puerta 3 veces, y te llamará por teléfono 2 veces. Si no contestas, no llames más tarde para quejarte de que no te llevaron la comida.
13 – Algunas personas quieren algo más que comida. Hay personas tan solas en el mundo que llaman al chico del delivery para hablar de su vida, otros para mover un sofá por las escaleras. Este tipo de clientes siempre deja una moneda extra.
14 – Decir tu dirección es sólo el primer paso. Asegúrate de que el número está en tu casa, que sea tu número, y que si dices “Planta baja departamento B” aclares, con “B de bueno”. Recuerda que por teléfono, una “B” puede sonar como una “D”, o una “E”.
15 – El chico del delivery no puede elegir. Tiene algunos clientes que son fantásticos, y algunos que son simplemente terribles. Pero va a llevarle su comida a todos ellos, esto es lo que hace para ganarse la lenteja. Ayúdalo.
16 – No entres en la ducha ni salgas de la casa inmediatamente luego de pedir comida.
17 – Si vives al lado del restaurante, no pidas que te lleven comida en hora pico. Mueve el trasero y busca tu comida.
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