Hay remedios naturales que a veces nos sorprenden por sus grandes aplicaciones ya que los conocíamos solo a nivel a culinario.
El orégano silvestre (Origanum vulgare) es la variedad de orégano más eficaz y es conocido, especialmente, en la cultura mediterránea. Ya era usado por los babilonios, también en el Antiguo Egipto y especialmente por los médicos islámicos en la Edad Media.
Hoy en día se ha venido usando básicamente a nivel culinario, como un condimento para pasta y especialmente en pizzas.
Lo que la mayoría de nosotros desconocíamos era su potente efecto como antibiótico natural y sobretodo su utilidad en casos de cándidas o candidiasis.
El orégano tiene una actividad anti-cándida o anti-candidiasis muy superior, por ejemplo, al ácido caprílico ya que tiene ungran poder antifúngico.
Los principios activos Carvacrol y Timol parecen ser los responsables de sus amplios beneficios en estos casos de cándidas o candidiasis.
Un detalle muy importante es que el aceite de orégano no afecta negativamente a nuestra "flora intestinal" sino todo lo contrario ya que al eliminar también las bacterias "malas" favorece la reproducción de las bacterias probióticas.
De todos modos muchos médicos tras un tratamiento para las cándidas o candidiasis siempre suelen aportar "flora intestinal" (en forma de cápsulas o comprimidos) para que el intestino recupere el nivel óptimo lo antes posible.
Quizá no sea el aceite orégano silvestre, en si mismo, un remedio definitivo pero si puede colaborar o formar parte del "arsenal" anti cándidas.
Otras propiedades del orégano silvestre
El orégano silvestre ha demostrado tener muchas más propiedades que el orégano cultivado y sería pues el más indicado en usos terapéuticos.
- Anti-parasitario: suele ser muy eficaz en la mayoría de los parásitos intestinales (amebas, lombrices, tenias, etc.) y especialmente en el caso de la Giardia lamblia.
- Helicobacter pylori: el orégano silvestre puede colaborar en su lucha ya que tiene un grandísimo efecto antimicrobiano.
- Antioxidante: su riqueza en ácido rosmarínico lo convierten en uno de los alimentos con un mayor poder antioxidante que existe.
- Problemas digestivos: para combatir los espasmos intestinales, colon irritable, distensión abdominal y flatulencias.
- Enfermedades respiratorias e infecciones: tos, resfriados, sinusitis, bronquitis, anginas, otitis, etc. Su efecto antiséptico es realmente muy eficaz.
- Problemas de piel: como el Pié de atleta (hongos en los pies), eczemas, psoriasis, etc.
Modo de empleo del aceite de orégano silvestre
Como antes hemos comentado es importante que sea un orégano silvestre y de la variedad Origanum vulgare. La forma más eficaz es en forma de aceite esencial (se venden en herbolarios y farmacias) Hemos de vigilar que en el envase especifique siempre que es apto para consumo interno.
El aceite de orégano silvestre siempre hay que tomarlo diluido con un poco de aceite de oliva u otro aceite vegetal y es mejor tomarlo justo antes de las comidas (tomarlo tras ensalivarlo durante unos 30 segundos) Nunca hemos de tomarlo ni aplicarlo a nivel externo sin diluir en aceite ya que es muy fuerte. Cuidado de no tocar, con el aceite, los ojos, heridas o zonas genitales ya que podría irritar mucho.
Como siempre el médico o especialista es el que nos recomendará la dosis adecuada a nuestro caso en particular.
En caso de no encontrar aceite esencial de orégano siempre nos ayudará el tomar diariamente orégano silvestre (preguntar en el herbolario) en las comidas (dos cucharaditas al día) o en forma de infusión (una cucharadita en una taza de agua hirviendo) dos veces al día.