El paseo
El cielo espejea entre los árboles. Los árboles se imaginan que están a orillas de un lago color violeta. Nosotros advertimos el engaño y a grandes voces espantamos a los árboles como si se tratara de unos altos pájaros verdes que hubieran escondido en el plumaje la otra pierna.
Cuando volvemos a casa empieza a holgar en mi cabeza el sombrero de copa de la noche.
Luis Vidales
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