Recoge pétalos de flores
Cuando era joven, mi hermano, mi hermana y yo solíamos preparar cestas
de flores para todas las casas del vecindario. Era sencillamente hacerlas, y
nos encantaba dejarlas colgadas en los pomos de las puertas principales, luego
tocar el timbre y correr a escondernos, para poder ver la cara de quien recibía
el obsequio. Fue entonces cuando aprendí por vez primera el particular placer
que significa hacer un regalo anónimo. He pasado mucho tiempo sin pensar en
ello, pero el placer que recuerdo es tan intenso que creo que volveré a hacerlo
con mis hijos esta primavera.
Susannah Seton
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FELIZ SEMANA MIS AMIGOS
ABRAZOS DE ....
MARYCIELO