Dios reza el Padre Nuestro…
José Luis Martín Descalzo
Hijo mío, que estás en la tierra preocupado,
solitario, tentado y abatido;
yo conozco perfectamente tu nombre y lo pronuncio
como santificándolo, porque te amo.
No, tú no estás solo, sino habitado por Mi
y juntos construimos el Reino que mi Padre prometió,
y del que tú serás heredero.
Me gusta que hagas mi voluntad,
porque mi voluntad es que tú seas feliz,
ya que la gloria de Dios es el hombre viviente.
Cuenta siempre conmigo y tendrás el pan para hoy,
y siempre que lo pidas en mi nombre.
No te preocupes: sólo te pido que sepas
compartirlo con tus hermanos,
con todos los hermanos, los ricos y los pobres,
los niños, los ancianos y los enfermos.
Sabes que perdono todas tus ofensas,
incluso antes de que las cometas,
por eso te pido que hagas lo mismo
con los que a ti te ofenden.
Para que nunca caigas en la tentación,
tómate de mi mano y te libraré del mal,
porque te amo hijo querido.