El Reino Unido se ha visto obligado a retirar de la televisión una campaña publicitaria en la que varias personas, entre ellas niños, explotaban al no sumarse a la causa ecologista que quería promover estos anuncios.

Las imágenes, que pretenden ser una parodia de lo que se conoce como "eco-fascismo", son tan explícitas que se puede ver, incluso, los chorros de sangre en el aula de aquellos jóvenes alumnos que no se declaran ecologistas.

La campaña, denominada "Sin presiones" y en la que se habla de los peligros del calentamiento global, pretendía criticar a las personas que no se comprometen con el medio ambiente y ha sido cancelada por su alto nivel de violencia.

En este vídeo, se ve cómo un grupo de niños escucha a la profesora consejos de ecologismo para que se emita menos CO2 a la atmósfera. Al final de la clase, los que no se consideran ecologistas saltan por los aires después de que la tutora pulse un botón rojo.

En otro anuncio de esta campaña, donde también les explotan las cabezas, colaboran jugadores del Tottenham Hostpur de la Premier League, como Peter Crouch. También un tercer spot mostraba a un jefe con su grupo de trabadores a los que les estallaba el cuerpo por no apoyar esta iniciativa.