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De: Pep-1 (Mensaje original) |
Enviado: 17/12/2010 08:21 |
Un día crudísimo de invierno, en el que el viento silbaba cortante, unos puerco-espines se apiñaban, en su madriguera, lo más estrechamente que podían.
Pero resultaba que, al estrecharse, se clavaban mutuamente sus agudas púas.
Entonces volvían a separarse; pero el frío penetrante los obligaba, de nuevo, a apretujarse.
Volvían a pincharse con sus púas, y volvían a separarse.
Y así una y otra vez, separándose, y acercándose, y volviéndose a separar, estuvieron hasta que, por fin, encontraron una distancia que les permitía soportar el frío del invierno, sin llegar a estar tan cerca unos de otros como para molestarse con sus púas, ni tan separados como para helarse de frío.
A esa distancia justa la llamaron urbanidad y buenos modales.
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Volvían a pincharse con sus púas, y volvían a separarse.
Y así una y otra vez, separándose, y acercándose, y volviéndose a separar, estuvieron hasta que, por fin, encontraron una distancia que les permitía soportar el frío del invierno, sin llegar a estar tan cerca unos de otros como para molestarse con sus púas, ni tan separados como para helarse de frío.
A esa distancia justa la llamaron urbanidad y buenos modales.
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De: Jazz |
Enviado: 17/12/2010 10:06 |
Hola!! muy interesante tu aporte
Sigamos manteniendo distancia con algunos
por si acaso nos caen cositas que hacen daño
Feliz fin de semana
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De: Paqui |
Enviado: 17/12/2010 18:17 |
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HOLA BUENOS DIAS
GRACIAS POR COMPARTIR
TAN BELLO MENSAJE, FELIZ DE LEERTE
QUE TENGAS UN BONITO
FIN DE SEMANA
SALUDOS DE TU AMIGA
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