Es el trino de la primavera.
El sentir de la vida, intensa e interesante, puede hacer que sea del todo casi constante, son como dioses, que acompañan por este vuelo, jardines llenos flores ¡De estrellas en el cielo!
Los pajarillos revolotean con su trino, parece que al oírlo me suena algo divino, esta primavera que ya llega exuberante, llena de colores vivos, siempre tan constante.
Su llegada con honores, siempre majestuosa, Y días plenos de larga vida como diosa; Mañanas de frescor como manda la autoría, esplendido por un día lleno de alegría.
DE LA RED
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