SIEMPRE TE IMAGINE COMO UNA PRIMAVERA
Siempre te imaginé como a una primavera
vistiendo la fragancia propia de esos años
cuando todo es ensueño y danza permanente
libando de la vida sus más ardientes rosas
Los sueños que forjé invocando tu rostro
y las exactas palabras que de tus labios partieron
cual leves mariposas en un mundo de niño
se han quedado grabadas para siempre en mi voz
Y es que en tu mirada de mar y de esmeralda
guardaron mis pupilas su reflejo de pájaro silvestre
como un faro buscando en la niebla del tiempo
la barca de canciones que partió hacia otro puerto
Cuando veo mis manos de Marqués desterrado
las mismas que ahora evocan tu paso de gacela
y tu cantar de estrellas en universos nuevos
solo pienso que el tiempo abre viejas heridas
Cuando veo mis ojos de trigo entristecido
los mismos que hoy se pierden en un mar de recuerdos
buscando aquél reflejo que partió de los tuyos
solo oteo una estela que huye entre las sombras
Siempre te imaginé como a una primavera
largas horas soñando con trenzarte el cabello
pobre iluso perdido en tu cuerpo de océanos
y tú regando besos sobre campos lejanos
por eso las distancias me crecen en el pecho
como un río que arrastra en su líquido vientre
lejanos horizontes desfallecientes soles
y la piedra que es música de cristales quebrados
Autor: César Lucil
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