Una artista utiliza las cenizas del occiso en la confección de su retrato.
Utilizar al cadáver como sujeto del cuadro y además como el material es sin duda un giro singular y tétrico del arte. Raven J. Collins considera que ella es la única artista que utiliza las cenizas fúnebres para sus retratos. Y nadie se molestó en disputarle el título.
Sus sujetos no sólo son humanos. También hace lo mismo con queridas mascotas que estiraron la patita. El número de cremaciones aumenta año a año y las ofertas para disponer de esos restos, también. Claro que esta opción puede ser un poco inquietante para conservarla a la vista.
El sitio PortraitsFromAshes exhibe algunos ejemplos de este singular arte en hombres, mujeres, animales y algunos de difícil clasificación.